lunes, 28 de marzo de 2022

Ya se hallaron microplásticos en la sangre de personas

 

Ya se hallaron microplásticos en la sangre de personas

Por Adán Salgado Andrade

 

Los microplásticos, partículas microscópicas derivadas de los plásticos, ya están en todas partes: aire, tierra, mar, incluso, en zonas prístinas (ver: http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2020/06/los-contaminantes-microplasticos-ya.html).

Así que es lógico que también aparezcan en nuestro organismos. Ya se han encontrado en las heces de bebés, pues las mamilas de las que beben líquidos, sueltan muchos de aquéllos (ver: http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2021/09/los-lactantes-ya-tienen-en-sus.html).

Ahora, un reciente estudio, halló que ya irrumpen los microplásticos en la sangre de personas que fueron analizadas. Es lo que expone el artículo del portal Gizmodo, titulado “Científicos hallaron microplásticos por primera vez en la sangre de personas”, firmado por Ed Cara, quien agrega que no está “clara la forma en que los plásticos que terminan en nuestros cuerpos, estén afectando nuestra salud (ver: https://gizmodo.com/scientists-found-microplastics-in-peoples-blood-for-the-1848698139).

Dice Cara que “nueva evidencia indica que pequeñas partículas de plástico, pueden alcanzar nuestro torrente sanguíneo. Un pequeño estudio, detectó microplásticos en un 80% de gente que se analizó. Pero por ahora, las implicaciones para la salud por esta exposición, no están claras. Investigadores examinaron muestras sanguíneas de 22 adultos saludables y hallaron trazas de plásticos en 17 de ellos. Los plásticos, incluyeron los que se usan en botellas, envolturas y bolsas de plástico. Otros investigadores, han hallado que los ingerimos, pero que los desechamos en los excrementos. Pero esta es la primera vez que se hallan en el sistema circulatorio, es decir, que pueden invadir y circular por todo nuestro cuerpo”.

Así de invasivos están siendo los plásticos, una pandemia de desperdicios ocasionada por la mano del hombre. Es de sobrecogerse que ya hasta estén en nuestra sangre. Como había dicho en otros artículos, llegará el momento en que nos analicen nuestros niveles sanguíneos de microplásticos y hasta habrá “niveles permitidos”, pues, así como vamos, a todo debemos de “acostumbrarnos”, hasta a la invasión de microplásticos a nuestro organismo.

Uno de los investigadores, Dick Vethaak, ecotoxicólogo de la Universidad de Vrije, de Ámsterdam, Holanda, dice que “es el primer estudio que muestra que tenemos partículas de polímeros en la sangre. Y es algo para estar razonablemente consternados”.

Claro, sólo imaginen, tener en nuestra sangre, la que alimenta nuestros órganos, microplásticos. Algo, por supuesto, deben de ocasionar partículas inorgánicas en nuestro organismo. Por ejemplo, a las mujeres que se han puesto implantes de silicón para agrandar los senos, cuando se les revientan, les ocasionan muy graves enfermedades (ver: https://www.mayoclinic.org/healthy-lifestyle/womens-health/expert-answers/breast-implants/faq-20058454).

Ya varios científicos han alertado de los peligros a la salud que pueden ocasionar los microplásticos, tanto para humanos, así como para plantas o animales. “Estos plásticos pueden contener químicos que podrían imitar nuestras hormonas, y todavía pueden ser más dañinos en niños. La acumulación de plásticos, sugieren algunos estudios, puede ser también capaz de dañar las células humanas directamente. En el 2020, un detallado reporte, realizado por investigadores medioambientales y de hormonas, afirmó que los plásticos son una amenaza global”.

Pero se siguen produciendo. Para las petroleras, son su salvación, ya que está disminuyendo la producción de combustibles, debido al incremento de autos eléctricos o a la eficiencia de los de combustión existentes (ver: http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2020/01/las-contaminantes-petroleras-y-coca.html).

De hecho, las partículas pesadas que se dan por tanta contaminación, al entrar a los pulmones, son atacadas por los macrófagos, que son los anticuerpos encargados de eliminar a amenazas, pero como no son bacterias, sino metales pesados o carbón, sólo mueren y se debilita todo el sistema inmune. Eso, lo muestra el documental sobre la brutal contaminación china, realizado por la periodista Chai Jing, muy preocupada porque su hija había nacido con un tumor – que resultó benigno – en el útero y que había sido provocado por la altísima contaminación del aire. Por ello, Jing se convirtió en ambientalista, advirtiendo de los peligros latentes, para la salud y el medio ambiente, si no se reducía la contaminación de China (ver: http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2017/06/la-creciente-y-letal-contaminacion-china.html).

En el caso de los microplásticos hallados en la sangre, los investigadores advierten que fueron realizados en una pequeña muestra, “pero ya, otros equipos,  están planeando hacer estudios con muestras más grandes, para confirmar sus resultados. Y también hubo variaciones en la cantidad de microplásticos hallados en la sangre de las personas de estudio. Y aunque se han hallado relaciones entre la exposición a plásticos y enfermedades como inflamación intestinal, diabetes tipo 2 e incluso cáncer, el nivel exacto del daño que pueden ocasionar los plásticos, todavía no se establece bien”.

No hace falta, de todos modos, ser científico para pensar en que, en efecto, el plástico es dañino a la salud.

Pero mientras siga siendo un buen negocio hacer casi todo de plástico, las empresas que lo producen, en lo que menos pensarán, es en todo el daño ambiental y a la salud de todos los seres vivos, incluido el ser humano, que su basura plástica provoque.

Para ellos, siempre será business as usual.

 

Contacto: studillac@hotmail.com

Cómo un intenso huracán, influyó para que se formara Bangladesh

 

Cómo un intenso huracán, influyó para que se formara Bangladesh

Por Adán Salgado Andrade

 

Bangladesh es un país asiático muy pobre, con un área de 148,460 km2 y una población de poco más de 168 millones de habitantes, la mayoría, musulmanes. Un 44% de su población, tiene hasta 24 años, o sea, es un país joven.

Su tasa de desempleo es de casi 13% y mucha gente padece hambre. Y el ingreso per cápita es de $4,400 dólares por persona, unos $92,400 pesos (ver: https://www.cia.gov/the-world-factbook/countries/bangladesh/).

Evidentemente, el ingreso per cápita, da una falsa idea del bienestar de los habitantes de ese país, pues millones están debajo de la línea de pobreza extrema, los que perciben un dólar o menos por día. Así que, en esos casos, su ingreso promedio sería de menos de 400 dólares anuales. Para que vean como muchos índices dan una idea equivocada de cómo marcha un país en cuanto a su desempeño de su economía.

En fin, leí hace poco un ensayo sobre cómo un fuerte ciclón, que tuvo lugar el 12 de noviembre de 1970, fue un factor clave para que Bangladesh se formara  (ver: https://www.wired.com/story/cyclone-pakistan-bangladesh/).

Hasta ese entonces, ese país era parte de Pakistán, la parte llamada Pakistán Oriental. Era absurdo, pues a ambas partes de Pakistán, las dividía India, como pueden ver en un mapa (ver: https://www.google.com/maps/@23.496582,76.0401655,4z).

Así que las dos partes, estaban destinadas, con el tiempo a ser dos países. La razón de tal separación era porque como India era un país budista mayoritariamente, las dos partes que conformaban Pakistán, eran musulmanas. De hecho, esas aberraciones geográficas, fueron cortesía del colonialismo inglés que sometió a distintos pueblos y religiones en una sola controlada colonia. Por eso, cuando finalmente se dio la “independencia” de lo que era India, los distintos grupos étnicos y religiosos se fueron disgregando y conformando en determinados países. De hecho, la “independencia” de India en 1947, dio lugar a su partición, en India y Pakistán, para que, algunos años más tarde, se dividiera Pakistán, en Pakistán y Bangladesh, como veremos.

En el mencionado ensayo, firmado por Scott Carney y Jason Miklian, se comienza narrando la fatídica noche del 12 de noviembre, de 1970, cuando un huracán nivel 4, o sea, muy poderoso, azotó la zona costera de Pakistán Oriental, la llamada Bahía Bengalí.

Se centra el relato en Mohammad Abdul Hai, un chico de 18 años en ese tiempo. Todos los habitantes de la isla de Manpura, en la que vivía Hai, escucharon que se aproximaba una fuerte tormenta, “pero de grado cuatro. Como ellos, estaban acostumbrados a la escala de diez, consideraron que cuatro, no era demasiado, así que no tomaron precauciones mayores”.

Pero cuando vieron que el agua del mar, luego de haberse retirado de la playa, se convirtió en una fuerte ola que, muy rápidamente, comenzó a inundarlo todo, entonces, trataron de salvarse. “Hai, pudo sujetarse a una fuerte palma, que había resistido muchas tormentas, pero vio morir a toda su familia, arrastrada por la fuerte corriente”.

Fotos muestran que muchas áreas de la isla y de la costa, desaparecieron bajo las aguas, dejando miles de personas y animales muertos.

Todo se atribuyó a que el sistema de alerta había fallado, como pudo certificar Neil Frank, un técnico del Centro Nacional de Huracanas de Estados Unidos, en la oficina ubicada en Miami. Precisamente porque eran tan frecuentes los huracanes en Pakistán oriental, su jefe, tres años atrás, había viajado allí para “crear un sistema de alertas de punta, con la ayuda de un satélite, lo que se llamó ITOS (tecnología satelital mejorada para la detección de huracanes, por sus siglas en inglés)”. Frank creyó que la foto que le habían dejado en su escritorio era de ese sistema, pero no, era un recorte de periódico, que informaba que tres cuartas partes de residentes de esa área costera habían muerto ahogados.

Así que aunque ITOS había tomado una foto del huracán, con buen tiempo, nadie había puesto a la población en alerta.

Como el Banco Mundial estaba invirtiendo mucho dinero para desarrollar Pakistán, sus directivos también se preguntaban porqué no se había advertido a la gente de ese destructivo huracán.

Así que Frank se le encomendó averiguar lo que había sucedido. Fue a Dacca, la capital de Pakistán, para analizar cuál había sido el problema. Allí, se puso en contacto con el encargado de la oficina meteorológica de Pakistán oriental, quien “le aseguró que había hecho todo lo que había estado de su parte, para avisar a la gente, pero que Pakistán Occidental, no había enviado la alerta a tiempo. Frank, trató de consolarlo, diciéndole que luego así sucedía y que él mismo había testimoniado que en Estados Unidos, muchas veces había pasado así, muertes excesivas, debido a que no se les había alertado a tiempo”.

Se entrevistó, luego, con un general, quien le dijo que si hubieran tenido un avión de reconocimiento, “habríamos advertido a la gente”. Pero Frank le reviró que un satélite era más fiable que un avión. Sin embargo, también el general le dijo algo que lo dejó frío, “Usted ve, Neil, este ciclón, nos resolvió más o menos medio millón de nuestros problemas”.

Ya, luego, comprendió Frank a qué se refería ese general y que, probablemente, la demora en avisar a la gente, hasta habría sido intencional

En pocas semanas, habría elecciones. El corrupto, totalitario presidente de Pakistán de entonces, Yahya Khan (1917-1980), ya tenía asegurado a su sucesor, Zulfikar Ali Bhutto (1928-1979), para que siguiera con su régimen totalitario. Sólo que ya figuraba muy fuerte en las preferencias de los bengalís de Pakistán oriental Sheikh Mujibur Rahman (1920-1975). Además, éste, tuvo más fuerza al ayudar a los damnificados, como al mencionado Hai, quien, cuando lo vio que llegaba a la zona de desastre y les ofreció ayudarlos, cuanto fuera posible, “de inmediato, optó por votar por el como presidente”.

Precisamente, la ayuda que prestó Rahman a sus conciudadanos, fue decisiva para que su partido, la Liga Awami, ganara varios escaños en la elección que siguió, lo que le garantizaría varias diputaciones. En Dacca, había ganado su liga 56 de 58 distritos, en tanto que en Pakistán Oriental, 151 de 153.

Era demasiado para Khan, quien desconociendo los resultados, mandó a sus soldados a “controlar” a Pakistán Oriental, así como a Rahman – conocido afectuosamente como Mujib –  y su Liga Awami.

Lo que sucedió de esa irrupción militar fue que Pakistán Oriental, apoyado por India, buscó de inmediato independizarse, lo que ocurrió en 1971.

Casi derivó en un conflicto internacional, pues a Pakistán, lo apoyaba Estados Unidos y  a India, la URSS. Por ello fue que, apoyadas por esas potencias nucleares, India y Pakistán, muy pronto, tuvieron sus propios programas para desarrollar mortíferas armas nucleares, de las cuales, tienen algunas docenas cada uno.

Y esperan usarlas si alguna vez se da una confrontación de ese tipo. Absurdo, pues una guerra nuclear, nadie la gana (ver: http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2020/10/el-sovietico-que-salvo-al-mundo-de-uno.html).

En fin, allí está un claro ejemplo de cómo los eventos climáticos extremos, pueden influir en los movimientos políticos, sociales y económicos.

Con el calentamiento global, se agudizarán los graves problemas que ya, de por sí, padecemos.

Y en lo que más pegan es en el empobrecimiento de la gente. Sequías, lluvias torrenciales, incendios forestales, ya están creando cientos de miles de desplazados cada año, los ecorefugiados, imposibilitados de seguir viviendo en sus lugares de origen. Al perder sus casas y su patrimonio, se empobrecen o más de lo que ya eran  (ver: http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2019/01/los-refugiados-climaticos.html).

Países precarios, como Afganistán o el revisado Bangladesh, ya padecen en todo su territorio, sequías, inundaciones, megaincendios forestales… agudizados por el calentamiento global, que dejan destrucción y muertos cada año.

Por si fuera poco, Bangladesh, alberga a uno de los mayores campos de refugiados, entre sirios, libaneses, etíopes, de Myanmar… en donde viven hacinadísimos, casi un millón de ellos, en condiciones deplorables (ver: https://www.jornada.com.mx/2022/03/27/mundo/019n1mun).

Así que el futuro de países, ya muy golpeados por los eventos climáticos extremos, es incierto.

Y, claro, el de la humanidad entera, pues por cada árbol, animal, planta o río que desaparezca, por las ascendentes temperaturas, efecto de depredación y contaminación ambientales, nos vamos empobreciendo.

¿Nos independizaremos, alguna vez, de las garras del capitalismo salvaje, el causante de tantos problemas?

Sería lo mejor.  

 

Contacto: studillac@hotmail.com

domingo, 27 de marzo de 2022

El caro coleccionismo de relojes antiguos y de famosos

 

El caro coleccionismo de relojes antiguos y de famosos

Por Adán Salgado Andrade

 

Los ricos, gracias a su gran poder adquisitivo, pueden darse lujos obscenos. Por ejemplo, Jeff Bezos, que súper explota a sus trabajadores, se mandó construir un lujoso yate de $540 millones de dólares, que es tan alto, que hasta se tendrá que desmontar un viejo puente holandés, para que esa ostentosa embarcación, pueda salir de un astillero de Ámsterdam, en donde se está construyendo (ver: http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2022/02/se-tiene-que-quitar-un-viejo-puente.html).

O coleccionan muy caros meteoritos, que buscadores de ellos, localizan, pues saben que pueden llegar a costar hasta millones de dólares (ver: http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2018/12/la-peligrosa-pero-muy-lucrativa.html).

Durante la pandemia, no sufrieron, pues se refugiaban en sus lujosas mansiones o súper yates, con tal de evitar contagios y otros inconvenientes (ver: http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2020/08/los-superricos-se-vuelven-mas-ricos-y.html).

Y son los que asisten a subastas de todo tipo: obras de arte, piezas arqueológicas, objetos personales de famosos, autos antiguos… y muchos otros objetos.

Últimamente, también andan “cazando” relojes antiguos, que hayan pertenecido a personajes famosos. Es lo que expone al artículo “Dentro del excitante mundo de los relojes raros y de la gente rica que los ama”, firmado por Julian Sancton, del portal Vanity Fair, quien agrega que “el reloj de 17 millones de dólares (mdd) de Paul Newman, fue el comienzo, Ahora, celebridades, íconos de la moda, subastadores, y gente común, se enfrentan con tal de poseer relojes vintage de marcas como Patek Philippe, Audemars Piguet y Richard Mille” (ver: https://www.vanityfair.com/style/2022/03/inside-the-frenzied-world-of-rare-watches).

Abre el artículo, una foto del desaparecido actor estadounidense Paul Newman (1925-2006), luciendo un Rolex Cosmograph. “Los Rolex Cosmograph, se cotizan, actualmente, entre 14,000 y 46,000 dólares, pero el de Paul Newman, se vendió en 17.8 mdd”.

Un subastador de relojes, Aurel Bacs, dice que “la gente busca relojes antiguos, pero que tengan historia. Soy muy selectivo en lo que voy a subastar, y rechazo un 90% de lo que nos traen”. Formó una consultora, Bacs & Russo, junto con su esposa, Livia Russo, precisamente para dar la certeza de lo que se vaya a subastar, que las piezas sean auténticas y pertenezcan a quien se dice que fue su propietario. Trabaja para la subastadora Phillips. Por ejemplo, vendió en cinco mdd el Rolex del emperador vietnamita Bao Dai (1913-1997), quien, como todos los personajes poderosos, no podía lucir cualquier reloj, sino un Rolex de oro.

Otra de las subastadoras es Christie’s, la que vendió el reloj Patek Philippe 2497, hecho en 1954, que perteneció a otro emperador, Haile Selassie (1892-1975), de Etiopía, por 2.9 mdd. Tampoco ese “poderoso” podía tener cualquier reloj. “Fue adquirido por David Parmegiani, coleccionista de relojes y autos clásicos, que se dedica a buscar piezas raras, para revenderlas muy caras”.

En los 1980’s, la venta de relojes mecánicos (los de cuerda o los automáticos, movidos con péndulos) se había estancado, pues comenzaron a salir los de cuarzo, como los Seiko, lo que hizo obsoletos a relojes como los Rolex de acero. Por lo mismo, los relojes mecánicos, ahora, son considerados de lujo y estilo, aunque uno de cuarzo, funcione mejor.

Y, por supuesto, es una cuestión también de nostalgia por ese tipo de relojes, sean viejos o los costosos modernos. En particular, sigo prefiriendo mis viejos relojes automáticos o de cuerda, como Orient o Citizen, así que comprendo a los que tienen nostalgia por seguirlos usando (no a los ricos que los compran tan costosos, claro).

En cuanto al Rolex de Newman, su esposa Joanne Woodward, se lo obsequió en 1969, comprándolo en Tiffany’s, “en Manhattan, por 300 dólares. Fue el primero de varios Rolexes que ella le regaló, cada uno con una frase grabada, con la que le pedía tener cuidado, cada que manejara. Ése, en particular, decía ‘maneja cuidadosamente’ “. Eso se lo decía la mujer, porque Newman era muy entusiasta de los autos de carrera. Nunca se mató, para su fortuna, y murió por las afecciones propias de la avanzada edad.

Ese reloj, en 1984, Newman lo regaló a James Cox, novio de su hija Nell. “Le preguntó la hora al chico, pero como éste le dijo que no tenía reloj, se lo obsequió. ‘Para que siempre des la hora, muchacho’, le dijo Newman”.

Unos 33 años más tarde, Cox se enteró del entusiasmo por relojes de famosos y de que el de Newman que él poseía, era muy codiciado. “El Rolex estaba muy maltratado por el tiempo, rayado y dañado por la humedad, por toda una vida de haberse usado. De no haber sido de Paul Newman, la subastadora Phillips no lo habría aceptado en esa condición, pero como era de él, el uso y el maltrato, sólo le añadían valor”, dice Sancton

Fue un reloj que se subastó en la noche del 26 de octubre del 2017 y alcanzó un absurdo valor de 17.8 mdd. “El comprador que lo quería, no puso límite”, dice Bacs, que fue el subastador encargado.

Expertos le dijeron a Sancton que eso se debió a que en ese año, todavía el mercado de las subastas estaba “muy emocional, dándole mucha importancia, por quién lo había poseído. ‘Es un reloj que no cuesta más de 150,000 dólares y si se subastara en la actualidad, no llegaría a los diez millones. Y si lograra venderse en cinco millones, tendría usted mucha suerte’ afirma un experto”.

Es lo que comentaba arriba, que los ricos gustan de tirar mucho dinero en una subasta, inflando demasiado los precios, sólo por quedarse con una pieza muy codiciada, que no vale, muchas veces, ni la milésima parte de lo que recaudó, como el referido Rolex de Newman, que se vendió en 11,866% más caro de su real valor. Quien lo posee, nunca recuperará lo que invirtió. Son meros, muy costosos caprichos.

Es un precio estratosférico que “se alcanza por algo que se llama, muy cortésmente dicho, fiebre de subasta, pero que la gente se refiere, despectivamente, como un concurso de a ver quién orina más”.

De Aurel Bacs, la gente “lo admira por sus habilidades para convencer a los compradores, de que una pieza vale la pena, pero él, no lo considera así, ‘simplemente, ofrezco piezas de calidad’ “.

Y con mucha historia, que sean de “un famoso”. Es una muestra de lo fetichista que es el humano.

Dice Sancton que también los ricos acuden a las subastas de relojes, porque no pueden conseguirlos nuevos, “ya que hay listas de espera de hasta cincuenta años, y si es que realmente se pueden incluir en esas listas, de las marcas más cotizadas. Por eso, los consiguen usados. Pero pueden enfrentar muchos problemas, porque les pueden vender falsificaciones o de que las historias, sobre que eran de famosos, sean falsas”.

¡Vaya, hasta se dan tanto su importancia los relojeros de lujo, de que “si se espera cincuenta años, a lo mejor, le podemos fabricar su reloj”! Una verdadera idiotez. Todo para lucir un costos reloj, que hasta les pueden robar. Véase, lo superficiales que son los ricos.

Por eso, para conseguir relojes de lujo, “aunque sea usaditos”, Phillips, Christie’s o Sotheby’s, son las subastadoras más buscadas, porque “sólo ofrecen piezas auténticas”.

Y es muy lucrativa la venta de relojes. “Philips, en el 2021, presumió de haber tenido la mayor venta de relojes, con un total de $209.3 mdd. Sus competidores, también tuvieron buenas ventas en ese año. Christie’s reportó $205 mdd y Sotheby’s, 148 mdd, un 50 por ciento más que en el año previo y muy arriba de las ventas prepandemia”.

Es que dice Sancton que los ricos, han estado “muy activos” comprando objetos de lujo durante la pandemia, “buscando en qué gastar sus dinero”.

Podrían gastarlo en ayuda humanitaria, en aliviar el hambre, ayudar a la recuperación ambiental, ayudar a mejorar la salud y la precariedad existencial de cientos de millones de personas. Pero no es así, prefieren gastarlo en “caprichos” de tener el Rolex de Newman o de algún otro famoso.

Y ni siquiera los pueden usar, porque se los roban, como le hicieron a un joyero llamado Shay Belhassen, a quien robaron un reloj Richard Mille RM 11-03 Flyback Chronograph de 50,000 dólares, en marzo del 2021. También, en París, roban relojes lujosos, tantos, que hasta se ha creado una división policiaca especial, para hallar a los ladrones y los relojes hurtados.

Bacs le dijo a Sancton que todavía hay algunas joyas. “Por ejemplo, el Omega Speedmaster que usó el astronauta Buzz Aldrin (1930), cuando estuvo en la luna en 1969. Pero, seguramente, si lo hallaran, iría a parar directamente al museo Smithsoniano”.

Muy seguramente, pues sería un ícono histórico, que tendría que estar en un museo, no en la vitrina de cristal cortado de algún ricachón.

Otra “joyita” es el Patek Philippe 2499 que perteneció a John Lennon (1940-1980), el famoso Beatle. “Un especialista que está familiarizado con ese reloj, me dijo que está en perfectas condiciones y que aunque no fuera de Lennon, es muy codiciado. Si se fuera a subastar, de acuerdo con varios expertos, podría alcanzar un precio de más de 30 mdd”.

Así que, allí tienen, otro de los caros “caprichitos” de los ricos, quienes prefieren tirar dinero en subastas, comprando inútiles objetos, exageradamente inflados de precio, que ayudar a saciar el hambre de millones de hambrientos o a reforestar diezmados bosques.

Es la mezquindad impuesta por el capitalismo salvaje.

 

Contacto: studillac@hotmail.com