sábado, 28 de agosto de 2021

A pesar de los megaincendios forestales, sigue habiendo quienes niegan el calentamiento global

 

A pesar de los megaincendios forestales, sigue habiendo quienes niegan el calentamiento global

Por Adán Salgado Andrade

 

Los temibles megaincendios forestales ya se dan hasta en Siberia y el Ártico, pues las crecientes temperaturas globales, provocan largas sequías y resequedad, que hace que los bosques sean potencial combustible, por el que un incendio puede propagarse rápidamente, como nunca antes se había visto (ver: http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2020/09/la-era-de-los-mega-incendios-forestales.html).

Todo eso es debido al ya irreversible calentamiento global, por el que los polos terráqueos se calientan hasta cuatro veces más rápido que el resto del planeta, como un estudio reciente del IPCC (el panel internacional del cambio climático, por sus siglas inglesas), demostró. Y, como vamos, ese calentamiento empeorará, subiendo las temperaturas globales unos 4º C, en el peor de los casos, seguramente, el que impulsaremos por la falta de consciencia ecológica del capitalismo salvaje (ver: http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2021/08/la-crisis-climatica-es-irreversible-y.html).

Sin embargo, a pesar de las evidencias irrefutables de que el cambio climático se está produciendo y ante los devastadores efectos que ya experimentamos – largas sequías, poderosos huracanes y tornados, torrenciales lluvias, infernales temperaturas, incluso en zonas templadas, entre otros –, hay gente que sigue negando que tal cambio y sus efectos existan.

Es lo que expone el artículo “Los negacionistas del cambio climático y los incendiarios fantasmas a los que culpan”, firmado por Molly Taft, quien dice que ahora esos negacionistas culpan a incendiarios de los megaincendios que se están dando en Estados Unidos y otros países (ver: https://gizmodo.com/climate-deniers-and-the-phantom-arsonists-they-can-get-1847500646).

Inicia comentando que recientemente autoridades californianas anunciaron el arresto de un profesor de high school, acusado de ocasionar el megaincendio bautizado como Dixie, “que es el segundo más grande incendio forestal que ha habido en la historia de California”.

Esa fue excelente noticia para los negacionistas, los que inundaron las redes con comentarios como “nueva táctica: provoquen grandes fuegos forestales y culpen al cambio climático”.

Se empecinan esos necios en que el cambio climático no existe, que es una mentira – como Donald Trump insistía – y que son criminales como el capturado profesor, los responsables.

Dice Taft que es innegable que haya personas que ocasionen incendios, “pero éstos son desproporcionados a los que se daban años atrás, que duraban unos días y eran controlados”. Ahora, los megaincendios forestales, duran meses activos, destruyendo árboles, fauna y hasta poblaciones que se encuentren en su destructiva senda.

“Los incendiarios no son algo nuevo, pero sólo 7% de los incendios forestales en California, pueden atribuirse a ellos. Muchos, se han debido a las empresas eléctricas, como PG&E, responsable de ocasionar, por chispazos de sus líneas de conducción, el incendio que en el 2018, destruyó el poblado de Paradise”, señala Taft.

Tiene razón, pues los negacionistas se empeñan en atribuir a otras causas, cuestiones como los incendios o hasta los poderosos tornados, diciendo que, de repente, es natural que se den esos fenómenos cada cien años. Lo que se rehúsan a notar es que ya son frecuentes, no cada cien o mil años.

Si los huracanes son cada vez más poderosos y destructivos es porque el calentamiento atmosférico, aunado al oceánico – ocasionado por aquél –, provoca que esos fenómenos reúnan mayor humedad, por la mayor evaporación del agua, de la que se nutren.

Y, por otro lado, las largas sequías, totalmente opuestas a los huracanes, se deben a la profunda resequedad que las altísimas temperaturas están provocando. Si mueren bosques, no hay humedad que atraiga a las nubes y por eso, las sequías son cada vez más largas y destructivas.

Los negacionistas aplicaron la misma fórmula de culpar a incendiarios de los devastadores megaincendios que tuvieron lugar en Australia, durante el 2018 y que “fueron obra de ellos”.

Y los megaincendios que se dieron en Turquía, también se achacan a incendiarios. En efecto, se arrestaron a personas que los ocasionaron, pero esa no es la razón de que sean tan intensos.

Cita Taft al psicólogo Stephan Lewandowsky, de la Universidad de Bristol, quien dice que la negación es un “fenómeno intrigante. Es como alguien que no creía en el covid, aun estando enfermo por esa causa, lo niega. Cuando algo es demasiado perturbador, lo mejor es negar que existe y culpar a otras causas de sus daños”. Pero no establece una conexión entre incendiarios y negacionistas. “Es una cuestión que se da, que haya un incendiario”.

John Cook, investigador sobre el cambio climático, también citado por Taft, le explica que es de muy conservadores el negacionismo. “Menciona el caso de la más conservadora y contenciosa congresista republicana Marjorie Taylor Greene, quien ha esparcido la teoría conspiracionista de que láseres espaciales, operados por los demócratas, ocasionaron el fuego que devastó a la comunidad de Paradise. Y a pesar de ser tan absurda, se acepta entre círculos de QAnon”.

QAnon es una comunidad conspiracionista que apoyaba – o apoya – a Donald Trump y su “lucha contra pedófilos en la filas demócratas, como Hillary Clinton y otros” (ver: https://www.bbc.com/news/53498434).

Además, difunden mensajes de odio racial en sitios como 4chan, del que surgió luego 8chan, sitio usado por el supremacista Brenton Tarrant, quien el 15 de marzo del 2019, en Nueva Zelanda, entró a dos mezquitas y asesinó a 51 musulmanes, pues Tarrant se consideraba de “raza superior” y los musulmanes eran “inferiores”. Ese tipo, tuvo la infamia de transmitir en vivo, por tal 8chan, la matanza que provocó en esas mezquitas (ver: http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2019/08/cuando-la-libertad-de-expresarse-se.html).

A lo más que llegan los negacionistas, es a atribuir los intensos incendios y la destrucción de sus casas a “actos divinos, pues Dios se está vengando”.

A veces, bajo ciertas circunstancias, los negacionistas pueden cambiar de opinión. El citado Cook le dijo a Taft que “mi padre era negacionista y yo nunca pude hacerlo cambiar de opinión. Mejor, ni hablábamos de eso. Pero, por alguna razón, ya cambió de parecer”.

Quizá su padre se puso a analizar que el cambio climático es una realidad al sentir las altísimas temperaturas que ya hasta en sitios templados se pueden experimentar.

Habría que llevar a los negacionistas al Ártico, en donde ya hay temperaturas de 26º C, y podrían andar con simples playeras (ver: http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2020/05/el-artico-ya-presenta-temperaturas-de.html).

Pero quizá sean tan necios que ni así crean en el calentamiento global y digan que se trata de simples “efectos especiales cinematográficos”, ¿no creen?

 

Contacto: studillac@hotmail.com

viernes, 27 de agosto de 2021

China y su hipócrita regulación de los ricos

China y su hipócrita regulación de los ricos

Por Adán Salgado Andrade

 

 

China es un país que aparentemente ha crecido tecnológica y económicamente, pero a costa de depredar sus recursos y los del planeta y contaminar desproporcionadamente. Además, para lograrlo, ha mantenido un férreo control sobre sus habitantes, con tal de que, doblegados y reprimidos, sirvan a la “causa revolucionaria”, muy pregonada por Mao Zedong (1893-1976), quien afirmaba que si mucha gente tenía que morir por la causa revolucionaria, era válido, como cuando se llevó a cabo el plan llamado “Gran paso adelante”, que buscó el aumento de la producción agrícola, fallido experimento que dejó a cientos de muertos de hambre (ver: http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2013/09/china-autoritarismo-capitalismo-salvaje.html).

Y la velada dictadura que ejerció en su momento Mao Zedong, ha sido perpetuada por sus sucesores. El actual dictador, el señor Xi Jinping, ya es criticado hasta por sus propios funcionarios, quienes ven el autoritarismo con el que Jinping controla a China, correspondiente con el que un “jefe mafioso” lo haría, como afirma Cai Xia, ex profesora de la elitista Escuela del Partido Central, y que por tales palabras, decidió abandonar el país, temerosa de las represivas medidas que Jinping tomaría en su contra (ver: http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2020/08/el-dictador-chino-xi-jinping.html).

No sólo dentro de China, sino incluso, fuera del país, la mafia china en el poder mantiene instalaciones en donde encierra a disidentes y activistas que se oponen a Jinping, a los que agentes especiales persiguen hasta dar con ellos, por mucho que pretendan esconderse en otros países (ver: https://apnews.com/article/china-dubai-uyghurs-60d049c387b99b1238ebd5f1d3bb3330).

Pero ahora, hasta contra los millonarios chinos, dueños de empresas tecnológicas que sobresalen en todo el mundo, Jinping la está tomando, con tal de “no perder el control sobre el poder que tales empresas poseen”. Es lo que expone el artículo de The Guardian, titulado “La fiesta terminó: China arremete contra los billonarios de empresas tecnológicas”, firmado por Vincent Ni, quien agrega que “la sorprendente riqueza de emprendedores chinos, ha sido una afrenta para la filosofía política de Beijing, además de que es una creciente amenaza para el partido comunista” (ver: https://www.theguardian.com/business/2021/aug/21/the-partys-over-china-clamps-down-on-its-tech-billionaires).

De repente, Jinping “recordó” que China es un país “socialista”. Y en una sesión de estudio del politburó “del 23 de noviembre del 2015, el presidente Xi Jinping, recomendó el libro Capital en el siglo veintiuno escrito por el economista francés Thomas Piketty. Dijo Jinping que ‘los datos tan completos que utilizó, demuestran que un capitalismo sin frenos, acelera la desigualdad en la riqueza y sus conclusiones valen la pena ser ponderadas”, anota Ni.

Pero ya, siglo y medio atrás, el economista y filósofo alemán Carlos Marx (1818-1883), había advertido sobre los peligros que entrañaba el desenfrenado capital y su fase monopolista, muy bien explicado en su obra cumbre “El Capital”, publicada en 1867.

“Desde que ascendió al poder, Jinping ha discutido la cuestión de la desigualdad en varias ocasiones. A principios del 2021, dijo a sus funcionarios provinciales que lograr la prosperidad común, ‘no sólo es un problema económico, pero algo muy significativo, muy importante como la base para que el partido pueda gobernar’. En las cuatro décadas que el predecesor de Jinping, Deng Xiaoping (1904-1997) permitió la liberalización económica, fuertes impulsos en manufactura y tecnología han permitido a unos cuantos en China a poseer vastas fortunas. Pero las cosas están cambiando, con los reguladores de Beijing atacando casi diariamente a esas bases de poder, en particular a los titanes de la tecnología, cuya influencia ha comenzado a dispersarse más allá de Asia“.

Y por tales ataques, en lo que va del 2021, cerca de un billón de dólares ($1,000,000,000,000), han disminuido en valor tales empresas.

Dice Jinping que no es prioritario que unos cuantos se enriquezcan y que es más importante “la prosperidad común de todo el pueblo”.

Si fuera sincera la posición del mandamás Jinping, seguramente hasta los activistas que critican el autoritarismo chino, se le sumarían en su “cruzada contra los ricos”. Pero eso sólo lo está haciendo para, como afirmó cuando dijo que era conveniente estudiar a Piketty, que sirva “como base para que el partido pueda gobernar”. Es decir, controlar a la gente, para que los privilegiados, como el propio Jinping, puedan seguir disfrutando de las mieles del poder. La corrupción de la clase china en el poder, ha logrado que sus miembros tengan innumerables privilegios y se hayan hecho de abultadas fortunas, las cuales, no están a discusión, por supuesto.

La mencionada Cai Xia, considera que es cuestión de tiempo que haya generalizados levantamientos sociales que protesten contra el autoritario control chino. Y es claro que estas “revolucionarias acciones”, son una forma hipócrita de Jinping de renovar la falsa imagen que tiene la mafia en el poder, comandada por él, para que siga siendo efectivo el control totalitario sobre el pueblo chino.

Y es lo que declara Yang Li, un investigador chino que trabaja en la Escuela Parisina de Economía, con lo cual, “se garantizaría el poder continuo del partido en el poder”.

Las empresas intervenidas son Tencent, compañía de redes sociales y juegos por línea, cuyo CEO, Pony Ma, posee una fortuna de unos $43,000 millones de dólares (mdd), de acuerdo con Forbes. Otra de las empresas es Alibaba, dedicada a servicios computacionales de nube, comercio por línea, productora de shows y películas para televisión. Su dueño, Jack Ma, posee $41,000 (mdd).

Y no queda allí, pues la popular y enajenante Tiktok, dedicada a los microvideos, propiedad de ByteDance, también está siendo regulada. Lo mismo sucede con Tencent, que se dedica a los juegos en línea.

Ni la empresa Didi, prestadora de servicios de transporte de personas por app, se salva. Pretexta la mafia china que son empresas que poseen la información de millones de usuarios y que podrían usarla en su contra (ver: https://www.wired.com/story/china-cracks-down-tech-giants-sound-familiar/).

Baidu, el llamado Google chino, también está en la mira. Y aplicando fuertes multas y regulaciones, la mafia china en el poder, pretende controlar su crecimiento.

“Lo único que lograrán es que se coarte la creatividad de los emprendedores chinos. Si China ha avanzado, ha sido gracias a ellos. Pero al ver en riesgo sus logros, pueden dejar de hacerlo”, dice Yuen Yuen Ang, mencionada por Ni, quien estudia la política económica de China, en la Universidad de Michigan.

Tratando de congraciarse con la mafia en el poder, Tencent, “dijo que destinaría $7,670 mdd para ayudar a crear la ‘prosperidad común’ de la nación”.

Por lo visto, Jinping, con tal de perpetuar su autoritario, dictatorial poder, está dispuesto a sacrificar a sus vacas sagradas. De todos modos, no es tonto, pues si las llegara a nacionalizar, las vastas fortunas que poseen, pasarían a manos de la mafia china que él comanda.

Y con esas acciones, está también afectando a los ávidos inversionistas de países como Estados Unidos, quienes viendo el éxito de esos gigantes chinos, apostaron toda su fortuna, muchos de ellos, con tal de recibir jugosos dividendos. De suprimirse esas empresas, perderían todo su capital, sin que ninguna cuestión legal pudiera evitarlo.

Insisto, ojalá que así se regulara al capitalismo salvaje en todo el mundo, pues su nefasta influencia, es la que ha dejado el desastre ambiental, económico y social que hoy padecemos.

Pero la intención del dictador Jinping es tramposa. Sólo quiere perpetuarse en el poder y continuar con el control del pueblo chino trabajador, para satisfacer sus mezquinos intereses y los de su camarilla en el poder.

Su lema podría ser “igualdad para los chinos comunes, pero riqueza para los que los controlamos”.

Vaya “socialismo”.

 

Contacto: studillac@hotmail.com

 

 

 

 

 

jueves, 26 de agosto de 2021

Ataques judíos a Gaza, han dejado a miles de palestinos muertos e incontables daños materiales

 

Ataques judíos a Gaza, han dejado a miles de palestinos muertos e incontables daños materiales

Por Adán Salgado Andrade

 

Por la actual pandemia, existen conflictos a los que no se presta atención o muy escasa. Uno de ellos, es el genocidio que están cometiendo los golpistas de Myanmar, quienes, en febrero del 2021, derrocaron a San Suu Kyi, la presidenta legítima, quien había ganado nuevamente las elecciones. Miles de personas han sido asesinadas o desaparecidas. Y los golpistas no tienen límites en la forma tan sanguinaria y violenta con la que pretenden “controlar” las múltiples protestas y manifestaciones que se están dando (ver: http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2021/02/en-myanmar-los-golpistas-estan.html).

Otro drama humano, es el que tiene lugar en Tigray, estado de Etiopía, en donde los intentos independentistas de una camarilla de militares, están siendo aplastados por las tropas etíopes, lo que ha redundado en muertes entre la población civil, por la violencia generada y por la hambruna que ese conflicto está dejando (ver: http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2020/11/guerra-en-etiopia-por-conflicto-entre.html).

Y otro conflicto que ya es añejo, pero que no deja de ser dramático, es lo que sucede en la golpeada franja de Gaza, en donde el neoenclave colonialista llamado Israel, mantiene en condiciones de apartheid a los palestinos que allí viven, además de que son frecuentes las incursiones militares, por cualquier motivo, que han dejado miles de muertos y casas destruidas.

Como señalé, el peso de la pandemia, ha vuelto casi invisibles a esos dramas humanos, en los cuales, por desgracia, la población civil es la más afectada.

Es lo que expone el artículo de la agencia Associated Press, titulado “Durante cuatro guerras, las consecuencias se sienten en un barrio de Gaza”, firmado por Adam Geller y Fares Akram, en el que describen los incontables daños y pérdidas familiares que ha sufrido una familia que habita Gaza, desde hace cincuenta años (ver: https://apnews.com/article/gaza-israel-hamas-war-middle-east-palestinians-e6d44f4e478cced2cfaeac61385020ac).

Varias fotos abren el artículo. En ellas, pueden verse los estragos que bombardeos judíos han dejado en Beit Hanoun, un barrio del norte de la franja de Gaza, habitado mayoritariamente por la familia Nassir. Se observan edificios ruinosos, inhabitables. Sus antiguos moradores, deambulan entre tales ruinas, lamentando que lo que fueran sus patrimonios, estén a punto de caer o ser demolidos, pues son inhabitables ya. Sus caras tristes, resignadas, contemplan las penosas escenas de lo que fueran sus casas o departamentos. Niños con caras tristes, pero algunos, quizá en su inocencia, jugando y hasta sonriendo. No pueden vivir allí, pues todo está derruido y abundan los montones de cascajo, de las demoliciones que se están haciendo. En un video, algunos de esos habitantes hablan. Una mujer llora porque su casa fue destruida por los judíos. “¡No tenemos esperanza, y estamos seguros que otra vez habrá una nueva guerra!”, exclama. Algunos comen entre esas ruinas, resignados a lo que venga. En otra ruinosa habitación, familiares de un joven muerto por los bombardeos, han colgado de una de las paredes su retrato, para recordarlo. Y al llegar la noche, la desolación es mayor, pues no hay electricidad que las alumbre, como si no quisiera mostrarse tanta destrucción. Muchos hacen fogatas, para iluminarse.

En otra foto, se ve a una niña que viaja sobre un colchón, colocado encima de una carreta que jala un burro, “pues sólo así, la gente puede hacerse de un sitio sobre el cual dormir, recogiendo colchones que quedaron abandonados entre bombardeadas viviendas”, anotan los reporteros. Una escuela, ha sido acondicionada como refugio, para todos los que se quedaron sin hogar. Y en otra foto vemos a un recién nacido, quien está siendo cargado por su abuela, que dice que, entre tanta desolación, “este bebé es una bendición de Dios”.

Y los que pueden, han podido rentar una vivienda, con tal de tener un sitio en donde puedan vivir. De todos modos, son varias las familias que no tienen recursos para reconstruir sus viviendas. “Y de nada nos vale, pues quizá en la siguiente guerra, nos las vuelvan a destruir”, declara Zaki Nassir, que habita desde hace muchos años ese barrio y ha perdido a muchos familiares.

“Desde el 2008, más de 4,000 palestinos han sido asesinados en los conflictos, de acuerdo con la ONU. Mientras que algunos eran militantes de Hamas, más de la mitad eran civiles. Miles han sido heridos. Y del lado de Israel, los fallecidos llegan apenas a 106, según las cifras oficiales”, escriben los reporteros.

El problema es que los civiles son los daños “colaterales” de las guerras que ha ocasionado Hamas, al atacar con cohetes a Israel. Son acciones irresponsables, pues los militantes de ese grupo, son los que menos mueren. Se entiende que estén en su derecho de protestar contra la opresión y represión judía, pero los ataques que realizan, son correspondidos por los militares judíos en una proporción mucho mayor, exagerada, dejando cada bombardeo que se hace durante varios días, a cientos de muertos y heridos y miles de casas destruidas.

La gente protesta que Hamas haga esos ataques, pues ellos son los que pagan con muertos o viviendas destruidas, las consecuencias de tales acciones.

“Las guerras han dejado más de $5,000 millones de dólares en daños a edificios de Gaza, caminos, sistemas eléctricos y de agua, casi el doble de la actividad económica anual de la franja. Cerca de 250,000 casas han sido destruidas o dañadas”, añaden los reporteros.

Y explican que, justamente, desde que Hamas, grupo de origen militar, tomó el control de la franja, los conflictos han sido más frecuentes que durante la época en que gobernaba el desaparecido Yasser Arafat (1929-2004), pues la actitud de Hamas ha sido más beligerante, sin ponerse a pensar en todo el daño que sus precipitados ataques ocasionan a sus conciudadanos.

Y como se trata de un país pobre, con cada ataque judío, las cosas empeoran. Muchos sectores destruidos por bombas y metralla, ya se quedan así, ni siquiera se demuelen, pues ya ni para eso hay recursos, a pesar de las donaciones de varios países.

“Pero esto es lo que nos queda, tenemos que vivir”, dice Zaki Nassir, contemplando a su familia, quien deambula en medio del destruido departamento.

Y narra cómo han muerto sus familiares. Uno de ellos, que vivía de transportar mangos en su carretón, fue asesinado por una bomba judía, pues “los militares judíos, decían que estaba transportando misiles, pero sólo eran mangos”, declara, muy triste por el recuerdo.

Y así ha sucedido con todos los muertos civiles, que han muerto porque los judíos han declarado, simplemente, que son “militantes de Hamas”, sin haber ofrecido prueba alguna.

Y como Israel raciona los materiales de construcción, “para evitar que Hamas los use en otras cosas, como túneles subterráneos”, es muy difícil reconstruir, aunque hubiera suficientes fondos.

Lo único que le queda a Zaki es resignarse. “Ya hemos estado aquí un mes, y nada nos ha pasado, pero nunca se sabe cuándo nos vuelva a atacar el ejército enemigo”, dice.

Así que aúnan a su pobreza y a su tristeza, la eventualidad de que se desate una nueva guerra y una bomba los haga pedazos.

Un drama humano, como señalé, casi invisible para el resto del mundo.

Pero para palestinos como Zaki y su familia, es algo cotidiano.

Y han de agradecer a Dios, que amanezcan vivos cada día.

 

Contacto: studillac@hotmail.com