El Ártico presenta cada vez más días con vegetación
por Adán Salgado Andrade
El daño hecho por tanta contaminación y depredación ambiental es ya irreversible. El principal responsable, es el sistema de sobreproducción y consumo compulsivo impuesto por el capitalismo salvaje (ver: http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2018/01/depredacion-ambiental-planetaria-accion.html).
Y en lugar de tomar medidas urgentes para, al menos, paliar esa destrucción y depredación, al contrario, todos los factores que lo ocasionan, siguen operando y hasta se incrementan, como la producción de plásticos, uno de los materiales que más basura produce y ya está en todas partes (ver: http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2020/01/las-contaminantes-petroleras-y-coca.html).
Eso ha tenido como lamentable resultado el aumento de la temperatura global, que ya está afectando incluso a zonas antes frías, como los polos terrestres. El Ártico, se está calentando cuatro veces más rápidamente que el resto del planeta, y ya presenta 26º centígrados de temperatura en verano, o sea, podemos andar en playera, sin ningún problema (ver: http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2020/05/el-artico-ya-presenta-temperaturas-de.html).
Por lo mismo, es un área que ya se descongela completamente, por varios meses, durante el verano y se ve verde, en lugar de blanca, como solía ser todo el año en los viejos tiempos, en que no estaba tan acentuado el daño planetario.
Esa situación, se comenta en el artículo de la revista digital Wired, titulado “Bellas, pero desconcertantes fotos del Ártico, haciéndose cada vez más verde”, firmado por Matt Simon, con el subtítulo “Usando drones trucados, científicos miran cómo la vegetación se multiplica en el extremo norte del planeta. Sus hallazgos, podrían tener implicaciones planetarias” (ver: https://www.wired.com/story/beautiful-yet-unnerving-photos-of-the-arctic-getting-greener/).
Abre el artículo una fotografía de la región de Yukón, en Canadá, muy cercana al Ártico, totalmente verde, pues pastos la cubren, resultado de la humedad que queda tras el acelerado deshielo. Pareciera una sabana, como las que pueden verse en África. Y es una región que, como señalé arriba, debería de estar cubierta de nieve en cualquier época del año. Dice Simon que “El Ártico se está haciendo cada vez más verde y es muy lindo, como usted podría esperar. Vastos estrechos de verdosa tierra costera, contrastan con el mar. Pero todo ese verdor es, de hecho, una alarma: la vegetación está creciendo más abundante al irse calentando más rápidamente esa región que el resto del planeta. Los paisajes norteños están sufriendo un cambio masivo, con potenciales consecuencias para todo el planeta”.
Un grupo de científicos, liderados por Jeffrey Kerby, de la universidad Aarhus de Dinamarca, empleando datos satelitales, drones y exploración a pie, buscan medir el impacto que determinada vegetación puede tener al propagarse tan rápidamente en áreas antes congeladas.
El problema con esa vegetación, es que impide que el aire gélido penetre al suelo y lo mantenga congelado, lo que es vital para que el permahielo no se siga derritiendo. De hecho, ya ese permahielo, que se suponía que nunca se derretiría, pues es el más viejo y profundo del Ártico, lo está haciendo y ello ocasionará que todo el CO2 y metano, que estuvieron encerrados por esa capa durante miles de años, se irán soltando y agregando a la atmósfera, incrementando los gases efecto invernadero que están calentando aceleradamente al planeta.
Además, la vegetación que está creciendo, que son pastos, que no rebasan en altura a la rodilla de una persona, son más obscuros, por lo que no reflejan la luz solar y eso, incrementará el calentamiento en los lugares en donde crecen, acelerando el derretimiento del mencionado permahielo.
Los drones que usan los científicos, están equipados con cámaras infrarrojas, para determinar qué tan verde es la vegetación, pues eso indicaría si, al menos, está secuestrando CO2 o, al contrario, está soltando más.
Combinando datos satelitales con la información obtenida de los drones, el equipo de científicos buscan indagar, como señalé, si todo ese exceso de vegetación, al menos, ayudará a secuestrar más CO2 o soltará más. Porque, si crece al inicio del verano, no permitirá que se congele el suelo y se retrase el deshielo del permahielo. Y si crece más tarde, plantas más altas, contribuirían a que ese CO2 sea secuestrado.
O sea, están tratando de hallar si, al menos, hay un efecto positivo de que el Ártico está verde cada vez más meses del año.
“Las plantas son como una especie de libros que tú puedes leer, pues ellas experimentan medios ambientes todo el año y los reflejan en ellas mismas, así que si deseas saber cómo está cambiando el clima, puedes verlo en las plantas”, señala Kerby.
Sin embargo, sean o no benéficos esos “nuevos” vegetales, el hecho es que el daño provocado ya al Ártico – y al Antártico – es irreversible.
Y la Naturaleza, sólo se ha ido adaptando al daño que estamos haciendo.
Y cuando no tiene forma de seguirse adaptando, el desierto es lo que queda.
Así como vamos, luego de lo verde en el Ártico, vendrá la desertificación.
En el futuro, lo que ahora vemos, será una caricia con lo que venga, cuando se diga “el verde del Ártico, ya está convirtiéndose en desierto”.
Y cuando eso suceda allí, imaginen lo que ya habrá pasado en el resto del planeta.
Pero es lo que menos le importa al capitalismo salvaje, con tal que su irracional sistema de destructiva y contaminante sobreproducción, siga siendo sostenido por inconscientes, insensibles consumidores compulsivos, igualmente desinteresados en que el planeta se convierta en un yermo desierto.
Contacto: studillac@hotmail.com