sábado, 27 de agosto de 2022

En EEUU, las escuelas hasta cierran por las altas temperaturas

 

En EEUU, las escuelas hasta cierran por las altas temperaturas

Por Adán Salgado Andrade

 

Los efectos climáticos extremos, ya los estamos sintiendo. Países o regiones en donde se gozaba todo el año de temperaturas templadas a muy frías, ya padecen los efectos del calentamiento global, como ondas de calor o severas inundaciones. La infraestructura urbana con que cuentan, estaba diseñada para los viejos, normales tiempos. Pero, en la actualidad, edificios, casas, escuelas, están desfasadas y en algunos casos, las altas temperaturas, requerirían que se contara con sistemas de enfriamiento, como aire acondicionado.

Es el caso de las escuelas de Estados Unidos (EU), que hasta deben de suspender clases por las altas temperaturas. El artículo del portal digital teenVOGUE, titulado “Salones de clase calientes: los estudiantes batallan para aprender, entre oleadas de calor y falta de aire acondicionado”, firmado por Mary Retta, narra las vicisitudes que están pasando estudiantes de escuelas de todo tipo, para estudiar o dejar de hacerlo, pues las oleadas de calor, impiden concentración y ganas de aprender (ver: https://www.teenvogue.com/story/hot-classrooms-student-learning).

Inicia comentando el caso de la maestra Molly Mus, “profesora de física y biología, en una escuela pública de Boston, quien dice que ha estado enfrentado temperaturas altísimas en su salón de clases durante los últimos años y no es debido a los experimentos de ciencia de sus alumnos. El edificio en donde ella trabaja, no tiene ventilación. Así que su salón, que no tiene aire acondicionado o ventilador de techo, se ha sentido muy caliente, debido a oleadas de calor sin precedente en el área. El distrito, les está pidiendo que mantengan sus ventanas abiertas, para mitigar los contagios de covid, pero cuando Mus colocó un ventilador cerca de la ventana para ventilar el salón, dice que el aparato, simplemente, arrojó aire caliente dentro del salón”. “La verdad, muchos estudiantes, ni vienen, cuando se ponen tan calientes los salones, se reduce dramáticamente la asistencia cuando el edificio se pone así de caliente. Y estar en el último piso, en donde más pega el sol, sin aire acondicionado, como que no es inspirador para alguien que desee aprender ciencias”, dice Mus.

Sí, en muchos países y sitios, en donde, de por sí, las temperaturas son altas, el aire acondicionado es imprescindible. Como en Arizona, ciudad construida en medio del desierto, en la que, sin aire acondicionado, es imposible vivir. Y la gente a la que le corten la electricidad, porque no pueda pagarla para que funcione su aire acondicionado, puede hasta morir por un golpe de calor (ver: http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2019/10/el-toxico-y-mortal-calentamiento-global.html).

Por otro lado, irónicamente, el fresco aire acondicionado, contribuye a calentar más al planeta, por el aire caliente que despide ese aparato de operación inversa (saca el calor del interior de las habitaciones en donde actúa). En la citada Arizona, en Phoenix, se eleva uno o dos grados por las noches, el calor que esta ciudad experimenta, debido al funcionamiento de los miles de aparatos de aire acondicionado con que cuentan sus habitantes. Además, adicionalmente, dichos aparatos, consumen demasiada electricidad (ver: http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2019/09/el-fresco-aire-acondicionado-agrava-el.html).

Continúa Retta diciendo que “como Mus, muchos estudiantes y maestros en todo EU, tienen sus clases interrumpidas por las constantes oleadas de calor y expertos medioambientales, predicen que todo se va a poner más caliente. De acuerdo con datos del 2021, de la EPA (Agencia de protección ambiental), 9 de los 10 años más calientes de que se tengan registros, en todo EU, han sucedido desde 1998 y el número de oleadas de calor, definidas como eventos calurosos que duran varios días, se han incrementado tanto en frecuencia, así como en duración desde los 2000’s. Este extremo calor, ha tenido un impacto negativo en la habilidad de los estudiantes para aprender. Tan sólo en el 2021, escuelas en Baltimore, Filadelfia, Detroit y otras ciudades, han enviado de regreso a sus casas a estudiantes, al reconocer que enseñar y aprender con calor tan intenso, es virtualmente imposible. Notablemente, varias de dichas escuelas, cerraron por ondas de calor en mayo, incluso antes de que el verano se presentara con todo lo que da – otro indicador de que estamos experimentando insoportables, muy altas temperaturas, por más meses durante el año, de las que antes teníamos”.

También señala que aunque las altas temperaturas se sienten en todo EU, son los estados del norte, los más afectados, pues sus escuelas no están diseñadas para soportar oleadas de calor y, más bien, estaban hechas para guardar el calor, pues esos estados eran frescos o muy fríos y no contaban con aparatos de aire acondicionado.

Joseph Allen, profesor asociado y director de los programas de construcciones saludables, de la Universidad de Harvard, dice que, antes, tenía sentido hacer escuelas que retuvieran el calor, pero no ahora, pues las oleadas de calor, comienzan desde enero o febrero y durante mayo, junio y septiembre, impactan a las escuelas y como no tienen aires acondicionados, se da lo que Allen llama “oleadas internas de calor”. “Aun cuando el calor se disipe fuera de las aulas, como estas están hechas para retener el calor, éstas altas temperaturas, se mantienen dentro”, señala.

Es comprensible lo que dice la profesora Mus, de que no es fácil dar clases con tanto calor. Yo mismo, en época de calor, en mi facultad, en esta ciudad de México (con el calor adicional que da el llamado “efecto isla de calor”), he experimentado, en época veraniega, altas temperaturas, quizá rondando los treinta grados. Ni manteniendo la puerta o las ventanas abiertas, es fácil enseñar o aprender.

Seguramente en miles de escuelas mexicanas, se da el mismo problema mencionado, que maestros y alumnos están sudando copiosamente, mientras “enseñan y aprenden”.

Ya es un serio problema de salud el calentamiento global, pues no sólo deja unos cien mil fallecidos por golpes de calor, inundaciones, megaincendios forestales, deslaves de tierras, sino que, a lo que no nos mata, nos hace difíciles nuestras actividades e, incluso, hasta nos está quitando el sueño, como han mostrado recientes estudios, pues las altas temperaturas, no permiten conciliarlo (ver: http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2022/06/el-calentamiento-global-afecta-el-sueno.html).

Y, en efecto, el aprovechamiento escolar se afecta. “Una investigación, muestra que el calor extremo es en detrimento del aprovechamiento en los estudios. En el 2017, otra investigación, realizada por la Universidad de Harvard, halló que las probabilidades de que un estudiante falle en una prueba, cuando las temperaturas son mayores a 90º grados F (32.2º C, que aquí, ya se sienten bastante calientes), fueron mayores en un 12%, que si se le aplicara en una temperatura de 72º F (22.2º C, ya algo más alta que templada). Otros datos, proporcionados por la Asociación Económica Estadounidense, muestran que los resultados de las pruebas aplicadas, son mucho menores cuando se aplican durante días consecutivos de calor extremo”.

Y claro que las escuelas de las zonas populares, son las más afectadas, pues los salones “están más llenos”. Y en las universidades en donde hay estudiantes que se alojan en ellas, en habitaciones compartidas, también sufren los efectos, como en la Brown University, en donde los estudiantes que viven allí, debieron de soportar “temperaturas de 100º F (37.7º, ya insoportables aquí en la ciudad de México). Y como no hay suficiente capacidad eléctrica para que los estudiantes cuenten con aire acondicionado en sus cuartos, las autoridades organizan eventos de ‘enfriamiento’, en donde se reparten paletas de hielo, botellas de agua, bolsas enfriadoras y popotes reutilizables, con tal de que aquéllos se refresquen” (no veo la utilidad de los popotes reutilizables, ¿serán para que se echen aire mutuamente con ellos?).

Y también los estudiantes con alguna discapacidad sufren más, como Julia Métraux, quien padece vasculitis y siempre requiere de aire acondicionado, “pero en la escuela, hay pocos salones con él, y me ha salido urticaria por tanto calor. Los que padecemos enfermedades, estamos más expuestos”, se lamenta la estudiante de la Universidad de Berkeley.

Retta preguntó a las autoridades de esa universidad el porqué de la falta de aire acondicionado generalizado y la respuesta  fue que “no contamos con él en todos los salones, porque las temperaturas son moderadas, además de que nos interesa ahorrar en costos de energía y no afectar tanto al medio ambiente. Pero si hubiera estudiantes con discapacidad, movemos la clase a un salón con aire acondicionado”, fue la cuestionable respuesta. Esas caras universidades, deberían de mantener sus instalaciones en óptimas condiciones y no tener a sus estudiantes sudando mientras escuchan a sus profesores. Como les comento arriba, es muy difícil dar una clase cuando hace demasiado calor.

Ya, en Filadelfia es obligatorio que las escuelas que no cuenten con aire acondicionado, cierren cuando las temperaturas asciendan más de 90º F (32.2º C, que como comento arriba, ya se sienten). El mencionado Allen dice que es crucial que se instalen aires acondicionados en todas las escuelas.

Es una ironía, en estos momentos en que Joe Biden ha establecido la meta de reducir en un 50% las emisiones contaminantes de EU para el 2030, pues tantos cientos de miles de aires acondicionados, incrementarían el empleo de electricidad y tales emisiones se elevarían (ver: http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2022/08/en-texas-las-gaseras-dejan-escapar.html).

Aunque Allen dice que con la “revolución verde” que Biden está impulsando, “usted puede dotar a todas las escuelas de aires acondicionados, funcionando con electricidad que provenga de fuentes limpias”.

Lo dudo, pues las gaseras de Texas, están con sus business as usual y a diario perforan nuevos pozos para extraer gas natural y de esquisto, con lo que la contaminación y el calentamiento global seguirán rampantes (ver:  http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2022/08/en-texas-las-gaseras-dejan-escapar.html).

La profesora Mus dice que en su distrito, contratistas están instalando aires acondicionados de ventana en algunas escuelas públicas de Boston. Su nueva escuela preparatoria, los tiene “y eso está bien, pues sólo así los estudiantes, pueden tener buen aprovechamiento. Recuerde que, como decía Maslow, primero se deben de satisfacer las necesidades humanas básicas, para que se puedan desarrollar todas las demás”.

Se refiere a los postulados de Abraham Maslow (1908-1970), psicólogo estadounidense que fue famoso por crear su Jerarquía de necesidades de Maslow, “teoría que establecía que la salud fisiológica, derivada de las acciones de respirar, comer, beber, tener sexualidad, dormir, homeostasis (el equilibrio corporal) y excretar, era fundamental para satisfacer las necesidades subsecuentes, que son las de seguridad (seguridad del cuerpo, del empleo, de los recursos, la moralidad, la familia, la salud y la propiedad), las del amor y la pertenencia (amistad, familia, intimidad sexual), las de la estimación (autoestima, confianza, logros, respeto a otros, ser respetado por otros) y las de la auto-actualización (moralidad, creatividad, espontaneidad, resolución de problemas, no tener prejuicios y aceptación de los hechos) (ver: https://en.wikipedia.org/wiki/Abraham_Maslow#Hierarchy_of_Needs).

Por desgracia, cuando Maslow publicó sus principios para estar bien, en 1943, no habría imaginado que con cada año que ha pasado desde entonces, la humanidad está lejos del alcanzarlos.

La salud fisiológica, que es fundamental, va siendo cosa del pasado, pues tanto hemos depredado y contaminado al pobre planeta, que ya no es posible que nos mantenga saludables.

Nos hemos ido enfermando, junto con la Tierra.

Gente que muere de hambre, de sed, de calor, de enfermedades conocidas y desconocidas, por la pobreza, por guerras, por la creciente violencia…

Ya no tenemos remedio, por muchos aires acondicionados que se instalen.

 

Contacto: studillac@hotmail.com