miércoles, 24 de agosto de 2022

Debería de emplearse la orina humana como fertilizante

 

Debería de emplearse la orina humana como fertilizante

Por Adán Salgado Andrade

 

Por estos días de guerra entre Rusia y Ucrania, han escaseado los fertilizantes, muy necesarios para las siembras.

Siempre he pensado que una buena solución sería emplear la orina y las heces humanas, para fertilizar las siembras. De hecho, antes de que los fertilizantes se inventaran, el excremento humano era muy valioso. En China, los cargamentos de aquél, eran llevados a los campos de cultivo, para que actuaran como excelente abono. Y es que, de acuerdo con la Corporación Alemana para la Cooperación Internacional, el ser humano produce de 50 a 55 kilogramos de excremento y 500 litros de orina anualmente, los cuales contienen 10 kg de compuestos de nitrógeno, potasio y fósforo, los tres nutrientes principales que las plantas requieren para crecer y, más o menos, en las proporciones adecuadas. Así que el excremento de una sola persona bastaría para fertilizar unos 200 kilogramos de cereales anualmente. (ver: http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2019/05/una-curiosa-historia-sobre-la-basura.html).

Justamente esa situación de tantos desechos humanos, ha llevado a algunos científicos a considerar el empleo, al menos, de la orina humana, como expone el artículo del portal arsTECHNICA, titulado “¿Deberíamos de tratar de crear una economía circular de la orina?”, firmado por Keely Larson, quien inicia diciendo que “la orina, tiene bastante nitrógeno y fósforo. Es un problema como desecho, pero muy bueno como fertilizante” (ver: https://arstechnica.com/science/2022/08/should-we-be-trying-to-create-a-circular-urine-economy/).

Dice Larson que “removiendo orina de las aguas residuales y usándola como fertilizante, tiene el potencial de reducir que los nutrientes se vayan a las aguas y que en lugar de eso, se empleen para elevar la sustentabilidad de las tierras, pues es un material desechado muy abundante”.

En efecto, el problema de las aguas negras es que tienen muchos nutrientes, como la orina, por ello es que se llenan más de bacterias y es más difícil reciclarlas. “El excesivo nitrógeno y fósforo en nuestro drenaje, puede estimular el crecimiento de algas y crear condiciones peligrosas para ecosistemas marinos, de lagos y para la salud humana. De acuerdo con el sitio de Rich Earth Institute (Instituto de la tierra rica), una compañía establecida en Vermont, enfocada a emplear los desechos humanos como un recurso, mucho del nitrógeno y fósforo en las aguas negras, proviene de la orina humana, aun cuando tal orina, sólo constituye poco más del 1 por ciento de aquéllas. Si se removiera la orina, podría removerse 75 por ciento del nitrógeno y 55 por ciento del fósforo de las plantas municipales de tratamiento de aguas negras. Y dichos nutrientes, podrían reciclarse como fertilizantes. Se tendrían que cambiar los sistemas como los conocemos. La infraestructura del drenaje saca el desperdicio de las casas, sin grandes complicaciones, usando tuberías que ya existen y sanitarios a los que la gente está acostumbrada. El aprovechamiento de la orina, requeriría cambiar algunos de estos detalles, pero que la orina fuera empleada como fertilizante, requeriría que la gente cambiara su percepción del desperdicio y viera que es valioso”.

En efecto, estamos acostumbrados a que nuestros desechos sean sólo eso, desechos, cuando que, como señalo arriba, podrían ser excelentes abonos, como lo fueron en la antigüedad.

Abe Noe-Hays, cofundador de Rich Earth, dice que lo que los ha llevado a tratar de usar la orina como fertilizante son las estadísticas de lo que le hace a las aguas negras, pero que la primera intención es removerla.

Eso se lograría con un WC que separara la orina de las heces (hay algunos experimentales). “Podría hacerse que la mitad delantera, juntara la orina. La tubería para las heces, quedaría igual y se agregaría otra para recolectar la orina en un tanque. El sistema quizá no sería perfecto, pero con sólo cambiar un poco la actual infraestructura, sería factible”, dice Noe-Hays.

De hecho, la importancia de la orina como fertilizante es recomendada hasta por la OMS (Organización mundial de la salud), la que indica que debe de dejarse almacenada seis meses, para que el amonio que contiene, sirva para sanitizarla, al elevar los niveles de PH, “los que matan los patógenos corporales que pudieran estar contenidos”.

Tampoco son gran problema los medicamentos que pudieran estar presentes, o sustancias como cafeína o ibuprofeno. En el caso de la cafeína, es tan bajo lo que contendrían vegetales fertilizados con orina que la contuviera, que “se requerirían 2,000 años de estar comiendo medio kilogramo diariamente para tener lo que contiene una taza de café de cafeína”, dice Noe-Hays.

Ya se usa la orina para jardinería, por ejemplo. Ustedes pueden abonar rosas si orinan en su maceta con regular frecuencia. “Si se usaran 1,000 galones (3,785 litros) de orina para fertilizar un acre (4,046 m2), se le agregarían 50 libras (22.67 kg) de nitrógeno, lo que enriquecería mucho a esa tierra”.

Noe-Hays dice que también se busca hacer más manejable el transporte de la orina. Se podría deshidratar, por ejemplo, pues se conservaría más la urea. En las tuberías, la urea se descompone y si eso se lograra evitar, se obtendría el nitrógeno que posee, que es de un 15 al 20 por ciento de su peso.

Pero, como señalé antes, si solamente se pudiera remover la orina de las aguas negras – sin pensar en usarla como fertilizante –, facilitaría su tratamiento por las plantas recicladoras, ya que habría menos desperdicios qué manejar.

También, podrían crearse pequeñas plantas de tratamiento, además de la mencionada separación de la orina.

Pero, antes, se debe de cambiar la mentalidad de la gente, como dice Lynn Broaddus, presidenta de Broadview Collaborative, una compañía de servicios de agua sustentable, establecida en Minnesota. “Es lograr que la gente no se asquee, porque sepa que la lechuga que se está comiendo en una ensalada, se fertilizó con la orina que excreta”.

Sí, en poco tiempo, parte de los problemas ambientales que también generan tanta orina y excremento desechados diariamente, por los casi ocho mil millones de humanos que habitamos a este depredado, contaminado planeta, tendrán que resolverse, logrando que sean aprovechados como fertilizantes.

De otra manera, nos vamos a ahogar entre tanta pipí y popó.

 

Contacto: studillac@hotmail.com