domingo, 17 de octubre de 2021

La agricultura voltaica

La agricultura voltaica

por Adán Salgado Andrade

 

Siempre son bienvenidos los adelantos tecnológicos y científicos, que contribuyan a mejorar este contaminado y depredado planeta, pues, desgraciadamente, la mayor parte, la primera aplicación que tienen, es en el desarrollo y fabricación de armas, muchas, mortíferos y aberrantes instrumentos de destrucción masiva (ver: http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2007/11/tecnologas-de-la-muerte.html).

El caso que mencionaré, es la aplicación de una de las energías verdes, las celdas fotovoltaicas, alimentadas por el sol, para, no solamente generar electricidad, sino para mejorar la siembra de algunos cultivos, como expone el artículo del portal Wired, titulado “¿Cultivando sembradíos bajo paneles solares? Es una idea brillante”, firmado por Matt Simon, quien agrega que “en el nuevo campo, literal, de la agricultura voltaica, los investigadores muestran cómo los paneles pueden incrementar los cultivos y reducir el uso del agua en un planeta que se está calentando” (ver: https://www.wired.com/story/growing-crops-under-solar-panels-now-theres-a-bright-idea/).

Parte Simon de que la evaporación cada vez aumenta más, debido al calentamiento global, una acción provocada por la humanidad y sus deleznables costumbres de depredar y contaminar al pobre planeta, cada vez más y más (ver: http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2019/10/el-toxico-y-mortal-calentamiento-global.html).

Aunque, debido a tal calentamiento, lloverá más en ciertas partes del planeta, en otras, prevalecerán las sequías, las cuales, serán cada vez más largas y severas, como la que afecta al oeste de Estados Unidos actualmente. La consecuencia es que, además de haber menos agua, pues se secan los cuerpos que la contienen, como ríos y lagos (artificiales, muchos de ellos), están produciéndose muy destructivos megaincendios forestales, incontrolables, que lleva meses extinguir (ver: http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2021/06/megasequia-en-california-empeorara-con.html).

Por lo mismo, cualquier forma que contribuya a ahorrar la mayor cantidad posible de agua, evitando su evaporación, es bienvenida. Dice Simon que “En el jardín solar ubicado en el condado de Boulder, en Colorado, cuyo dueño es Byron Kominek, 4 de sus 24 acres (9.71 ha.), están cubiertos con paneles solares. La granja mantiene varios cultivos debajo de tales paneles – zanahorias, col, jitomates, ajo, remolachas, rábanos, lechuga y más. Y también genera suficiente electricidad para 300 casas. ‘Decidimos hacer esto, en términos de ver cómo podíamos hacer más dinero de una tierra que pensábamos que debía de generar más’, señala Kominek”.

Por desgracia, sobre todo en Estados Unidos, el primer incentivo es ganar más dinero. Pero si eso contribuye, finalmente, a reducir evaporación y que rindan más esas cosechas, pues valdrá la pena, incentivo económico aparte.

Y es que, como señala Simon, no sólo se trata de colocar paneles solares en techos, para producir energía para una sola casa, sino que al colocar paneles sobre cosechas, se tiene electricidad extra para, incluso, vender (de nuevo, el incentivo económico).

Ahora, se piensa, incluso, en cubrir canales de agua con paneles, para reducir evaporación, y generar electricidad al mismo tiempo (ver: https://www.wired.com/story/why-covering-canals-with-solar-panels-is-a-power-move/).

Por eso, se están colocando paneles en granjas, pues ayudan a regular la cantidad de sol que requieren distintos cultivos, así como la evaporación.

Científicos como Greg Barron-Gafford, de la Universidad de Arizona, señalan que es un sistema en que “es una rara combinación, en que es un ganar-ganar-ganar, pues al cultivar estas plantas en la sombra, reducimos el estrés al que se les somete, por tanta evaporación y tanto sol que las cocina, sobre todo, en zonas más secas”.

En sus experimentos, ha visto que algunos cultivos, se benefician de menor exposición al sol, pero también, los trabajadores, que pueden trabajar en un ambiente menos soleado.

Una de las fotos que ilustran el artículo, muestra una estructura metálica, de unos cuatro metros de alto, sobe la que se colocan los paneles solares, los que, en efecto, producen sombra. Debajo, varias hortalizas crecen.

Tiene lógica implementar esa técnica, pues los cultivos no reciben, de golpe, la radiación solar, más ahora, que el calentamiento planetario, la hace más agresiva. Y se conserva agua.

De hecho, los mismos campesinos mexicanos, procuran, a su manera, disminuir la evaporación. Por ejemplo, hace tiempo, uno de ellos me decía que es bueno que se cubra la tierra de los cultivos con materia orgánica, como restos de plantas, para reducir tal evaporación.

También, los paneles evitarían que, cuando lloviera demasiado, las cosechas se dañaran, como ustedes pueden verlo cuando, por ejemplo, llueve torrencialmente que, si tienen plantas, son dañadas. Sería otra ventaja, colocando paneles solares.

Y el beneficio extra sería el de la generación eléctrica, incluso, para ir prescindiendo de aquella generada por termoeléctricas, que emplean combustibles fósiles para hacerlo. Además, la evaporación que generan esos cultivos, ayuda a enfriar los paneles, los que funcionan mejor a menores temperaturas. Es también una ventaja más.

Por supuesto que es una solución cara, que sólo gente con posibilidades podría adoptar, pues, actualmente, tan solo electrificar una casa con paneles solares, costaría unos $150,000 pesos como mínimo para hacerlo, pues cada panel solar cuesta unos 14,500 pesos y se requerirían unos diez (ver: https://www.enersing.com/precio-de-paneles-solares-para-casa).

Pero ya es una ganancia que no se hayan aplicado los paneles fotovoltaicos para hacer, digamos, un arma que funcionara con sol.

Así que, bienvenida la agricultura fotovoltaica, la que podría aplicarse, incluso, en una pequeña hortaliza casera. Podríamos cultivar jitomates y chiles y hasta generar suficiente electricidad, como para usar la licuadora para preparar una sabrosa salsa con ellos, ¿no creen?

 

Contacto: studillac@hotmail.com