El acelerado derretimiento del
Ártico y sus consecuencias climáticas
por Adán Salgado Andrade
El
permahielo (permafrost) del Ártico es la capa de hielo que, se suponía, nunca
iba a fundirse pues, como su nombre lo indicaba, era permanente. Sin embargo,
un nuevo estudio científico demostró ya lo contrario.
La
revista tecnológica Wired publicó un artículo recientemente (retomado de la
publicación Grist), en donde se señalan los pasmosos efectos que el
derretimiento del Ártico, dos veces más rápido de lo que se creía no hace
mucho, tendrán en el planeta, y serán mucho más catastróficos que los que
estamos viviendo (ver: https://www.wired.com/story/the-arctic-carbon-bomb-could-screw-the-climate-even-more/).
El
estudio, publicado por el área medioambiental de la ONU, indica que aunque ya
no expulsáramos gases efecto invernadero hoy mismo, de todos modos el Ártico
está ya atrapado por 4 o 5 grados centígrados más de temperatura en relación a
los 1900’s, por lo que se está calentando dos veces más rápido que el resto del
planeta. Estudios con modelos computacionales indican que para el año 2030, no
tendrá nada de hielo en los veranos. Terrible, pues esa región de hielos
permanentes, en el verano, estará como cualquier otra y muy caliente.
Lo
peor es que el permahielo que posee, se derretirá y dará paso a un “gigante
dormido”, compuesto por gases efecto invernadero, principalmente carbono y
metano. Al derretirse, los microbios que alberga, despertarán y comenzarán a
producir tales gases, por la descomposición de los deshelados suelos.
Y
las estimaciones de lo que vendrá, varían, pero se piensa que alrededor de 1.5
billones de toneladas (1,500,000,000,000) de bióxido de carbono, CO2,
acechan inmersas en el permahielo de la Tierra.
Eso
equivale a más de cuarenta veces el CO2 producido en el 2018 y al
doble del gas que actualmente permanece en la atmósfera.
Así
que es un problema que empeorará el de por sí grave calentamiento global que ya
sufrimos y que es irreversible, desgraciadamente, aunque se hable de que se
debe de limitar a no más de 20C para el 2050 (ver: http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2018/10/el-irreversible-y-catastrofico.html).
Eso, porque, como para el 2030 se encogerá el
permahielo un 45%, no podrá realmente cumplirse con los límites del aumento de
la temperatura estipulados. El reporte indica que “nueva evidencia sugiere que
el permahielo se está derritiendo mucho más rápidamente que lo previamente
estimado, con consecuencias no sólo para las personas y ecosistemas que lo
habitan o integran, sino para todo el planeta por los círculos redundantes que
lo retroalimentarán”.
El llamado efecto de “bomba de carbón o
“bomba de metano” será uno de los daños inmediatos. No sólo será la liberación
de esos gases para el 2050, sino el daño a la infraestructura existente, de
todo tipo, en el Ártico, como a los centros poblacionales, en donde viven unos
4 millones de personas, 10% de las cuales son nativas. Las casas colapsarán,
los caminos, se desnivelarán e importantes sitios culturales y arqueológicos se
verán amenazados, además de la fauna vegetal y animal.
El acelerado y mayor calentamiento que el
resto del planeta se debe a un fenómeno llamado “amplificación ártica”, debido
a que es una región redundante, como explica el reporte, “Cuando el hielo se
derrite en el verano, abre áreas negras de agua, las que absorben más calor del
sol, el que, a su vez, derrite más hielo”.
Y aunque los efectos cambiantes del Ártico
aparezcan para muchos tan lejanos, se dejarán sentir en todo el planeta. Para los
habitantes de las costas, el derretimiento de los glaciares y del Ártico, será
responsable de un tercio del aumento del nivel del mar en todo el mundo. Eso
afectará gravemente las regiones costeras, por las consecuentes inundaciones,
los edificios dañados y la contaminación salina de fuentes de agua potable.
Los “ciclones bomba”, que se han dado en el
medio oeste de Estados Unidos (EU), el más reciente, a mediados de marzo del
2019, se deben al cambio climático. Son una “atípica” combinación de fuertes
vientos, hielo y lluvias torrenciales. El mencionado de marzo, dejó fuertes
inundaciones y daños a miles de casas, siembras, bosques y otros sitios. El fenómeno
no termina allí y se advierte que las lluvias seguirán hasta mayo, desbordando
ríos como el Mississippi, que por las inusuales lluvias, no podrá desalojar la
excesiva agua con la velocidad requerida, provocando más inundaciones (ver: https://www.wired.com/story/those-midwestern-floods-are-expected-to-get-much-much-worse/).
Unos 200 millones de estadounidenses enfrentarán
tales inundaciones y cientos de miles tendrán que cambiar de residencia,
uniéndose a los ya varios millones de personas en todo el mundo que son
obligados a cambiar el lugar en donde viven, debido a que son ya casi
inhabitables por los daños que ocasiona el cambio climático, como sequías,
inundaciones, incendios forestales, temperaturas de más de 400C y
otros perjudiciales efectos para la vida humana. Son los llamados refugiados
climáticos y en EU hay ya varios millones de ellos (ver: http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2019/01/los-refugiados-climaticos.html).
La gente del planeta que habita tierra
adentro, sufrirá clima impredecible y agresivo. Las corrientes marinas
cambiarán, lo que interferirá con los patrones climáticos de hasta la alejada
parte sur del planeta. Las largas sequías en Estados Unidos y otros lugares,
como en Australia se ligan a esos cambios climáticos (ver: http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2019/01/la-muy-larga-y-severa-sequia-australiana.html).
Potentes huracanes y el vórtice polar que
azota ocasionalmente a toda Norteamérica y Europa serán cada vez más
frecuentes, además de intensos.
Así que el derretimiento del permahielo
ártico tendrá implicaciones muy graves más pronto de lo que pensamos. La
biodiversidad, ya muy afectada, por tanta depredación, contaminación y el calentamiento,
acelerará su reducción y también repercutirá en nuestra propia, cada vez más
vulnerable existencia (ver: http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2019/03/la-perdida-de-biodiversidad-la-perdida.html).
Con cada día que pase, si seguimos comportándonos del mismo modo, las
cosas empeorarán.
Quizá por ello, cientos de miles de
adolescentes de muchas escuelas en más de cien países, alentados por la gran
activista ambiental adolescente, sueca, Greta Thunberg, se pusieron en huelga
el 15 de marzo de 2019, exigiendo que los indolentes, irresponsables adultos
hagan algo para, realmente, detener el cambio climático y dejarles un planeta que
sí puedan habitar (ver: https://www.wired.com/story/kids-and-teens-strike-against-adults-climate-screw-ups/).
De otra forma, lo que les legaremos, será la
terrible tarea de sepultarnos, y sepultarse ellos, cuando nada ya se pueda hacer
y comencemos a morir todos masivamente.
Contacto: studillac@hotmail.com