lunes, 2 de octubre de 2023

Drogas, armas y pobreza, impulsan el crimen mundial

 

Drogas, armas y pobreza, impulsan el crimen mundial

Por Adán Salgado Andrade

 

En México, la violencia que vivimos se debe a tres factores: el tráfico de drogas, el incremento de armas – que vienen de contrabando de Estados Unidos – y la pobreza. Es muy fácil que un joven se integre a una banda criminal si es pobre y, carente de una sólida base de valores – proporcionada por una educación liberal e iluminadora y vida familiar digna –, sólo verá a lo material como lo más importante, no tendrá objeciones en vender drogas, traficar personas, robarles, secuestrarlas, matarlas… factores que están llevando más y más a una descomposición social.

Eso sucede en Estados Unidos, por ejemplo, en donde el problema es todavía mayor, crónico, debido a la gran cantidad de armas que poseen los estadounidenses. Tiroteos, enfrentamientos entre personas y suicidios, dejan más de 45,000 fallecimientos cada año (ver: http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2022/07/otros-crimenes-de-los-que-no-se-habla.html).

Y esa violencia, provocada por los mencionados factores, se está expandiendo por todo el mundo.

Nada menos que en Suecia, un país de “primer mundo”, está creciendo la violencia, con jóvenes y adolescentes que se integran a bandas que trafican drogas y que van en aumento esos “reclutamientos”.

El artículo de Miranda Bryant, titulado “’No queremos que los maten’: Suecia trata de prevenir el mortal ascenso del crimen juvenil”, publicado por The Guardian, expone ese grave problema que en días recientes ha ido en aumento (ver: https://www.theguardian.com/world/2023/aug/27/sweden-seeks-to-stem-deadly-rise-in-youth).

Justamente señala al inicio la periodista que la facilidad para conseguir armas y hasta explosivos, es lo que ha llevado a niños a integrarse al crimen organizado. Tanto armas, como drogas, “se consiguen muy fácilmente”, dice Sabrina Farlblad, de las oficinas de servicios sociales, citada por Bryant. “Hace dos años su equipo formó grupos de apoyo para gente joven en riesgo de integrarse al crimen”.

“Armas que proceden de los Balcanes y que se consiguen fácilmente, llegan a gente cada vez más joven, lo que ha multiplicado los asesinatos o intentos de asesinato entre niños y adolescentes”.

Tan sólo en los primeros seis meses del 2023, hubo 42 personas envueltas en intentos de asesinato, comparadas con las 38 que hubo en todo el 2022, “así que es preocupante para las autoridades el incremento”. Y van desde los 10 años, incluso, hasta los 17.

Pero como señala Evin Cetin, abogada experta en crimen juvenil, citada por Bryant, que “no podemos combatir el crimen juvenil, sin acabar con el tráfico de drogas, que vale miles de millones de dólares”. Tiene razón, pues mientras exista el consumo de estupefacientes, que crece, además de las drogas “legales” que emplean opioides, ese crimen nunca se acabará.

Véanlo con el caso de México, por estar justamente al lado del mayor consumidor mundial, la violencia criminal cada vez será peor, llevando, en efecto, al incremento de violencia juvenil, con niños sicarios que ven en aquél, su futuro.

Dice Cetin que “en Suecia, son jóvenes los que se encargan del narcotráfico. Compran medio kilogramo de cocaína mediante un préstamo y contratan a niños para distribuirla. Por eso se dan estos tiroteos entre gente muy joven. Me he encontrado con chicos de 18 años que tienen a su servicio a unos 40 niños y adolescentes vendiendo drogas”.

Critica Cetin que muchos digan que la “solución” sería encarcelar a la gente desde los 15 años, “pero eso no resuelve nada. Que los internen en sitios para menores en donde les impartan programas de rehabilitación, pero que no los encarcelen”. También señala Cetin lo que ya expresé arriba, que la pobreza y la “falta de sueños entre los adolescentes, los llevan a delinquir”.

La policía teme que pronto comiencen a ingresar armas de la atacada Ucrania, tanto por el contrabando como por los refugiados. Ya dije que si las armas se consiguen fácilmente, se incrementa la violencia.

En un podcast también de The Guardian, Sebastian Stakset (Suecia, 1985), ex pandillero, actualmente muy exitoso cantante, rapero y actor –  ya que pudo superar esa vida – y ha formado el grupo sueco de ayuda Heart of Evangelism, expone a la reportera Nosheen Iqbal, las circunstancias que lo llevaron, desde muy joven, a delinquir (ver: https://www.theguardian.com/world/audio/2023/oct/02/gangs-of-stockholm-the-rise-of-gun-in-sweden-podcast).

“Era la pobreza, la falta de una familia sólida y la facilidad para conseguir dinero, la que te lleva a eso”, dice Stakset. Justo lo que señalo arriba, son factores que se combinan para que una persona, frágil de valores, se convierta en delincuente. No sólo que proceda de una buena familia, digamos, sino que también sea sensible, amoroso, compasivo, tolerante, humilde, preocupado, compartido… cualidades que un ser pensante posee y que hacen la diferencia en que nunca considere como la solución volverse delincuente.

También Stakset señala que no es válido que digan que son los “migrantes lo que se meten a la delincuencia. En Suecia, te puedo decir que los mejores negocios, son los de los migrantes. Yo soy blanco y me hice pandillero. Nada tiene que ver la nacionalidad. Como te dije, es la pobreza, la falta de empleos dignos, de educación, de una buena familia… lo que principalmente te lleva a eso”.

Insiste en que la solución, “es dar buenos empleos, educación, un futuro… no sólo que los políticos elaboren planes para veinte años, si no atienden esas necesidades”.

Así es, y con ellos, deben de inculcarse los mencionados valores, pues no se trata sólo de combatir las consecuencias, encarcelar a los delincuentes, sino atender desde la raíz los problemas.

Se requiere una educación liberadora, no funcionalista, entre otras cosas, para que los estudiantes se sientan como personas, no como instrumentos del capital, necesarios sólo para obtener ganancias, sino que comprendan que son parte de una sociedad y es para la que tienen que dedicar sus esfuerzos (ver: http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2023/09/la-escuela-debe-de-ser-liberadora-para.html).

Y eso tiene que ir a la par con el amor, el respeto por la Naturaleza, pues si no se valora un árbol sano, un río limpio, aire saludable… se es una persona obscura, mezquina, miserable. Hace unos días, por ejemplo, un perturbado mental de sólo 16 años, derribó un árbol de 200 años, en Inglaterra. El suceso conmocionó a toda la gente, acostumbrada a ver ese saludable, alto, bello árbol, que estaba a un lado de una antigua, histórica barda romana. Ese chico es, desde ahora, una máquina de matar, que fácilmente se puede integrar al narcotráfico (ver: https://apnews.com/article/hadrians-wall-sycamore-gap-felled-tree-05975a763c90648b4594d6e64b42e9f2).

Así que si no se combate la pobreza, si no se inculcan verdaderos valores humanos desde la niñez, si no se imparte una educación liberadora, si no se enseña a amar a la naturaleza (independientemente de que el capitalismo salvaje es el centro de todos nuestros problemas, al mercantilizarlo todo e imponer que la riqueza material es el objetivo a seguir) el crimen seguirá en ascenso, en todo el mundo y los delincuentes serán cada vez más jóvenes.

Quizá veremos a niños sicarios de cinco años en la nota roja, habiendo asesinado a un sicario adulto por un “ajuste de cuentas”.

Sería terrible.

 

Contacto: studillac@hotmail.com