Cuando el glaciar Doomsday se derrita, se elevará tres metros el nivel del mar
Por Adán Salgado Andrade
El calentamiento global es irreversible y sus destructivos efectos, se sienten en todo el planeta.
El derretimiento de los polos y los glaciares, es uno de tales brutales efectos. No es parejo ese calentamiento. En los polos terrestres, la temperatura se está elevando ¡cuatro veces más rápido que en el resto del planeta. Ya se experimentan temperaturas de 38º centígrados o más en el Ártico (ver: https://www.smh.com.au/world/europe/arctic-temperature-soared-to-unprecedented-38-degrees-in-2020-scientists-say-20211215-p59hlo.html).
Eso, debido a que, siendo una esfera la Tierra, el calor se concentra más en esos extremos, además de que al descongelarse el hielo, las aguas que quedan son obscuras, lo que provoca que se absorba más la luz solar e incremente más la temperatura. Además, el hielo también está contaminado, es grisáceo e igualmente absorbe más calor (ver: http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2020/05/el-artico-ya-presenta-temperaturas-de.html).
El daño es parejo en los dos polos. El acelerado derretimiento del hielo que poseen, ha provocado, en el caso del Polo Norte, el Ártico, que varios icebergs se hayan desprendido en recientes años y anden surcando el mar, hasta que se vayan deshaciendo y derritiendo totalmente. Por esa razón, el nivel marino ha ido ascendiendo algunos centímetros.
En el caso del Polo Sur, la Antártica, los letales efectos se están sintiendo en el llamado glaciar Thwaites, también conocido como el Doomsday, pues cuando se derrita totalmente, elevará el nivel del mar tres metros. Su derretimiento es ya irreversible. Pero hay algunos científicos que lo están investigando, para medir, justamente, qué tan rápido se derrite. En el artículo “Cómo con explosivos, un robot y un trineo se estudia el glaciar Doomsday”, firmado por Matt Simon, se expone lo rápido que tal glaciar, ubicado en la Antártica, se está derritiendo, “y científicos se apresuran para investigar el daño” (ver: https://www.wired.com/story/how-explosives-a-robot-and-a-sled-expose-a-doomsday-glacier/).
La investigadora Erin Pettit, científica climática y climatóloga de la Universidad de Oregón, desde hace dos años investiga al glaciar, reuniendo datos con instrumentos que lleva en un trineo, para estimar lo más exactamente posible, la velocidad de derretimiento. “El glaciar pierde 50,000 millones de toneladas de hielo cada año. Extendiéndose a lo largo de 75 millas (120 km) de la costa de la Antártica, abarcando un área del tamaño de Florida, es actualmente responsable del 4 por ciento de la elevación del nivel del mar. Se posa sobre tierra y mar. En tierra, se le llama ‘capa de hielo’, en tanto que sobre el mar es una ‘meseta de hielo’. Cuando se derrita totalmente, jalará a los glaciares que lo rodean, lo cual hará que el nivel del mar suba unos tres metros”.
Se calcula que en unos tres a cinco años, la meseta de hielo del glaciar, se colapsará, lo que llevará a la declinación de lo que quede de aquél. “Cada año, imágenes satelitales, muestran fracturas más profundas y largas, las que crecen 6 millas (9 km) por año y se dirigen hacia el hielo más delgado”.
En suma, es, como su nombre lo indica, un desastre que creará un daño planetario. Para comenzar, las zonas costeras, quedarán inhabitables. Los puertos y ciudades que estén allí, tendrán que ser abandonados. Los puertos actuales, ya no podrán usarse, lo cual afectará el comercio entre naciones. Lo que demuestra cómo el cambio climático está dañando, no sólo ambientalmente, sino que está perjudicando de forma severa a la economía de personas y países.
Sólo piensen en una inundación de, digamos, un metro. Los muebles de las casas, quedan irremediablemente dañados, sobre todo, electrodomésticos, camas, sofás, libreros… lo cual significa que la gente que la habite, tendrá que adquirirlos de nuevo. Además, tendrán también que reparar los daños a sus viviendas. Si tenían una economía precaria, al tener que adquirir de nuevo esos muebles o hacer las reparaciones, se precarizarán más sus condiciones de vida. Si no pueden comprarlos o reparar sus casas, pues se quedarán sin esos necesarios bienes y viviendo con los daños ocasionados, lo que degradará más la situación en la que ya vivían. Es una merma microeconómica.
Y si lo ven a nivel de país, la infraestructura dañada, como un puerto, carreteras, vías de ferrocarril, edificios de oficinas… llevará a gastos de reconstrucción. Si se tenían presupuestos para cuestiones necesarias, como salud, educación, vivienda, nueva infraestructura… ya no podrán hacerse, pues deberá de dedicarse tal dinero a reconstruir. Es una merma macroeconómica.
Son fuertes pérdidas. En Estados Unidos, los daños que dejaron las inundaciones por huracanes y los fuertes tornados decembrinos del 2021, ocasionaron daños de más de mil millones de dólares, más de veinte mil millones de pesos. Y de no hacerse nada para aminorar el calentamiento global y los daños que provoca, se calcula que para el 2050, el mundo habrá sufrido daños globales por $23,000 billones de dólares (23,000,000,000,000,000), cantidad que equivaldría a más del doble del Producto Interno Bruto de EU anual (ver: https://gizmodo.com/there-is-no-adapting-to-extreme-weather-1848338322).
Pero no sólo son los daños materiales, sino sociales, ecológicos, psicológicos. Un litoral inundado, implicará la muerte de árboles o animales que habiten las costas. Gente morirá por miles. Los que no mueran, deberán de emigrar a otras partes y eso, si tienen los medios para hacerlo. Los así llamados ecorefugiados, gente que emigra de sus lugares de origen por cuestiones climáticas, ya son cientos de miles cada año (ver: http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2019/01/los-refugiados-climaticos.html).
Para ver qué tan rápido se está derritiendo el glaciar, Peter Washam, oceanógrafo y climatólogo de la Universidad de Cornell, y su equipo, hicieron navegar una especie de submarino robotizado bajo el glaciar. Al estudiar las imágenes, comprobaron que el oleaje, se introduce bajo la parte del glaciar que está sobre tierra firme, lo que acelera su derretimiento.
Es lo mismo que comprobó Lizzy Clyne, geofísica y glacióloga del Clark College, quien con su equipo de científicos colocan pequeños explosivos en agujeros de 6 metros que cavan en el hielo. “Un arreglo de sismómetros en la superficie, mide cuánta energía de cada explosión rebota de lo que hay debajo del hielo. Sería como un radar de penetración. Y de hecho, Clyne también usa un radar para verificar ese rebote de ondas”, dice Simon. “Con esa información, podemos estudiar y entender mejor lo que está sucediendo, lo que pasará y cómo mitigarlo lo más posible”, comenta Clyne.
Tan grave es lo que sucede con ese glaciar, que otros dos equipos de científicos, están colaborando para saber más de cómo se está derritiendo. Uno de ellos, que son parte del International Thwaites Glacier Collaboration, sumergirán un submarino llamado Boaty McBoatface y otros instrumentos, para documentar lo que pasa debajo del glaciar. De lo que ya han investigado es que ese glaciar se está encogiendo, por el derretimiento, a razón de 2 kilómetros anuales, “y quizá se suelte de la costa cuando comience el año 2030” (ver: https://gizmodo.com/boaty-mcboatface-is-set-to-confront-antarcticas-doomsda-1848309721).
Nada de las mencionadas investigaciones, evitarán que el glaciar se derrita y suba el nivel del mar, como ya está sucediendo. “Pero es deseable que se tomen prontas acciones para reducir más las emisiones y medidas para irse adaptando, sobre todo, en las costas”, dicen los científicos.
Por desgracia, la realidad es que es irreversible el calentamiento y el derretimiento del hielo planetario. Pero hay cínicas empresas que ya hasta le sacan provecho, como las petroleras que están perforando pozos en el Ártico para explotarlos cuanto antes. O las empresas que ofrecen sus servicios para construir diques que “eviten” inundaciones en las ciudades costeras. O las que venden terrenos en donde antes había hielo (ver: http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2014/03/el-muy-lucrativo-calentamiento-global.html).
Como bien indica el nombre del glaciar, el Día del Juicio Final, avanza con cada día más que depredamos y contaminamos.
Nosotros mismos seremos los causantes de nuestro masivo final.
Contacto: studillac@hotgmail.com
