El Pentágono usó falsa campaña de vacunación para asesinar a Osama bin Laden en Pakistán
por Adán Salgado Andrade
El 2 de mayo del 2011, un equipo de operaciones especiales de mariners estadounidenses, luego de la invasión de la soberanía de Pakistán, mediante una operación encubierta, supuestamente cazaron y asesinaron a Osama bin Laden (1957-2011), el líder supremo de la organización “terrorista” al-Qaeda. Fue cuando bin Laden ya no le era útil a Estados Unidos (EU), país que, mediante la CIA, su Agencia Central de Inteligencia, lo apoyó, cuando los mujaedines, a los que aquél pertenecía, se deshicieron de la influencia soviética de Afganistán, en 1979 (ver: https://en.wikipedia.org/wiki/Soviet%E2%80%93Afghan_War).
Así que bin Laden fue una creación que, al final, se le salió de control a EU, una especie de Frankenstein que ya no le servía, luego de sus muy útiles servicios “terroristas” – al derribar las torres gemelas el 11 de septiembre del 2001 –, gracias a los cuales, EU pudo justificar la invasión de Afganistán, en el 2001 y, luego, de Irak, en el 2003. Además, la “amenaza terrorista” ha sido muy lucrativa desde entonces, para todas las empresas estadounidenses dedicadas a “combatir al terrorismo” (ver: http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2007/11/la-amenaza-terrorista-el-nuevo-gran.html).
Por tanto, había que cazar al “monstruo”. Y eso lo hizo EU, mediante un montaje que ahora sale a la luz. Consistió en simular una “campaña de vacunación” contra la hepatitis B en Pakistán, concretamente en Abbottabad, el pueblo en donde se pensaba que se escondía bin Laden. Es lo que expone el artículo del portal científico ZME Science, titulado “Cómo un engaño de la CIA, concebido para cazar a Osama bin Laden, incrementó el sentimiento antivacunación en Pakistán”, firmado por Tibi Puiu, quien agrega que “Una falsa campaña de vacunación, diseñada para confirmar la localización de bin Laden, dañó programas legítimos de vacunación organizados en ese país años después” (ver: https://www.zmescience.com/science/news-science/how-a-cia-sham-meant-to-hunt-down-osama-bin-laden-swelled-antivaxx-sentiment-in-pakistan/).
El artículo expone el grave problema de que la mayoría de los pakistaníes, se rehúsan a vacunarse contra el covid-19 – independientemente de que las vacunas no sean tan efectivas –, pues a la fecha “ sólo unos 1.8 millones de pakistaníes han sido vacunados en las oficinas públicas y poco más de 18,000, en hospitales privados, lo que hace menos del 1 por ciento de la población de Pakistán”.
Es un país con 216.6 millones de personas, así que, en efecto, menos del 1 por ciento han sido vacunados. Podría suceder lo que pasa en India, que la pandemia, se ha salido de control y a diario se contagian y mueren por miles (ver: https://www.bbc.com/news/world-asia-india-56969086).
Y todo porque, en el 2011, se montó una falsa campaña “gubernamental” para tomar muestras de sangre en Abbottabad, con las cuales, se pudo verificar que entre tales muestras, estaban las de hijos de bin Laden o de sus parientes.
“La CIA, reclutó a un doctor importante de Pakistán, quien, bajo la cobertura de una campaña masiva de inmunización, debía obtener muestras de DNA de los niños que vivían en Abbottabad, para confirmar la localización del que era, en ese entonces, el hombre más buscado del mundo”, dice Puiu.
Y, gracias a esa mentira, pudo darse con bin Laden, a quien, sin mediar su supuesta rendición, se le asesinó – o eso se dice – en su casa.
El hecho es tan vergonzoso, por la violación de la soberanía paquistaní, que en la cinta del 2012, “Zero Dark Thirty”, conocida aquí como “La noche más obscura”, la directora Kathryn Bigelow, muestra los excesos a los que llega EU cuando se propone realizar alguna obsesiva “misión”. En la escena del asalto a la casa, en donde se suponía que vivía bin Laden, ubicada en el mencionado Abbottabad, un equipo especial de mariners viola, tanto el espacio aéreo pakistaní, al llegar en dos helicópteros antirradar, no rastreables, así como el territorio de dicho país, al incursionar en el barrio en donde se localizaba la casa de seguridad, en la que vivía desde hacía algunos años un enfermo, inoperante bin Laden. Con lujo de violencia, dinamitando puertas y asesinando a mansalva a varios hombres y mujeres que estaban allí en la noche del asalto, los prepotentes soldados allanan la casa, hasta dar con el “terrorista” jefe de Al Qaeda, a quien asesinan sin miramientos, pues la orden era exterminarlo en el acto. Seguramente sabía muchas cosas “incómodas” para EU. Y a los vecinos del lugar que, curiosos y temerosos, se acercan, sorprendidos y asustados por escuchar a uno de los helicópteros que, al perder el control, cayó a tierra, además de tantas explosiones y disparos, uno de los mariners los amenaza con que se retiren del sitio o les dispararán (ver: https://en.wikipedia.org/wiki/Zero_Dark_Thirty).
De hecho, EU, considera al mundo “como su casa” y sus agentes se sienten con la libertad de violar soberanías y jurisdicciones, con tal de “atrapar” al delincuente en cuestión. Fue lo que hicieron con Kim Dotcom, polémico empresario alemán, quien fundara el sitio Megaupload, especializado en guardar todo tipo de archivos musicales, fílmicos y demás, obtenidos ilegalmente, o sea, mediante piratas informáticos, quienes tenían en ese sitio, un paraíso aparentemente inviolable. El FBI, allanó la casa de Dotcom, que no estaba en EU, sino nada menos que en Nueva Zelanda, país que se prestó servilmente para su arresto (ver: http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2013/03/el-capitalismo-salvaje-y-su-salvaje.html).
Así que no sorprende que hayan simulado una campaña de vacunación para lograr su mezquino objetivo los militares estadounidenses.
Pero, como señala Puiu, la muerte de bin Laden, “no acabó con el extremismo en Pakistán y los movimientos religiosos conservadores, se han vuelto más influyentes. Luego de ese evento, en los tres años siguientes, muchos grupos terroristas – principalmente el Talibán paquistaní – llevaron a cabo sangrientos ataques y se atrincheraron en áreas tribales del noroeste, limítrofes con Afganistán”.
Es cierto, pues la “amenaza terrorista”, no se acabó con la muerte de bin Laden. Al contario, han surgido más grupos, como el Estado Islámico, y se han dado decenas de actos “terroristas” en varios países europeos, como Inglaterra, Francia, Austria y Alemania. Ese asesinato, sólo recrudeció al “terrorismo”.
Pero lo que sí logró, fue que en Pakistán, como señalé, la gente se niegue a ser vacunada.
El Talibán, ha empleado la falsa campaña de vacunación para reivindicarse, diciendo que “la CIA y Estados Unidos, son enemigos del pueblo y las campañas de vacunación, son un engaño para controlar a la gente”. Incluso, ha agredido a trabajadores de campañas de vacunación reales.
“La CIA se fue hace tiempo de Abbottabad, pero diez años después, las repercusiones de su obsesiva operación para localizar a bin Laden, todavía las sienten los pobladores locales. En un nuevo estudio, investigadores de la Universidad de Warwick, de Inglaterra, hallaron que el truco de la vacuna ha originado una significativa baja en los niveles de vacunación de Pakistán”.
Y no sólo está afectando a la vacunación actual, sino a las empleadas contra la polio, la triple, contra difteria, tosferina y tétanos, o la de la rubeola, enfermedades muy contagiosas. Y si ya se habían controlado, regresarán fortificadas, como está sucediendo con muchas enfermedades infecciosas, ocasionadas por virus y bacterias que, con el tiempo, se han fortalecido, tales como la tuberculosis (ver: http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2018/12/la-fortalecedora-evolucion-de-bacterias.html).
Justamente eso está sucediendo con el mismo covid-19, que está mutando a nuevas cepas, más contagiosas y letales (ver: https://www.aljazeera.com/news/2021/5/10/who-declares-indian-coronavirus-mutation-variant-of-concern).
En varias partes de Pakistán, los índices de vacunación, han bajado entre el 23 y 39 por ciento. O sea, que de 23 a 39 personas, de cada cien, ya no se vacunan.
Eso es grave, no sólo por la cuestión del covid-19, sino, como señalé, de otras enfermedades infecciosas.
“La evidencia empírica, destaca que eventos como el mencionado, que hacen dudar de la integridad de los trabajadores de salud o de las vacunas, pueden tener severas consecuencias para aceptar productos para la salud, como las vacunas. Esto es muy relevante en la actualidad, pues la aceptación pública de las vacunas contra el covid-19, es crucial para combatir la pandemia”, cita Puiu a Andreas Stegman, uno de los autores del estudio.
Pero no pensó en eso EU, cuando hizo su pantomima de la vacunación, con tal de cazar y deshacerse de bin Laden.
Y cuando las muertes por covid-19 y otros males, comiencen a incrementarse y a descontrolarse en Pakistán, esperemos que EU brinde “ayuda humanitaria” a ese país, del que burló su soberanía hace diez años.
¿Así que, cuál será la nueva mentira que EU empleará para cazar a otro muy buscado hombre? ¿Una pandemia?
Contacto: studillac@hotmail.com