La mafia china en el poder, emplea Twitter y FB para negar represión de uigures
por Adán Salgado Andrade
China es un país dominado por una mafia que, hacia afuera, pretende mostrarse como “progresista”, pero que, en realidad, ejerce el poder totalitariamente, aplastando cualquier intento de subversión por parte de los ciudadanos que buscan un cambio de ese sistema tan represor. Cai Xia, ex profesora de la elitista Escuela del Partido Central, quien huyó del país, temiendo por su vida, por las críticas que hizo a Xi Jinping, el mandamás chino, afirma que éste se comporta más como un “jefe mafioso” que como un líder del país (ver: http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2020/08/el-dictador-chino-xi-jinping.html).
El tratamiento que da a los uigures, una etnia no china, es deleznable, pues se opone a su legítimo clamor por independizarse de ese país. Hay varios testimonios, como el de Gulbahar Haitiwaji, una mujer uigur que cometió el error de regresar a China, luego de varios años de exilio en Francia, país al que su esposo, sus dos hijas y ella, huyeron, dada la constante discriminación y humillación a la que eran sometidos en Xinjiang. La metieron en un campo de concentración, en donde le enseñaron los “valores chinos”, a fuerza de tortura mental. Muchos de los prisioneros mueren allí, debido a las torturas y malos tratos a las que son sometidos (ver: http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2021/01/una-sobreviviente-de-un-campo-de.html).
Por otro lado, en la cuestión económica, China ha abrazado por completo al sistema capitalista salvaje, depredando a sus recursos, contaminado su medio ambiente y obligando a su gente a trabajar muy duro, a cambio de bajos salarios y jornadas extenuantes. Se ha convertido en la maquiladora mundial y hoy, muchas manufacturas son hechas o armadas allí. Dice el escritor Yu Hua que “hace treinta años, antes de la brutal industrialización, no se veían rascacielos, aparte de uno o dos en grandes ciudades como Beijing o Shanghái, no sabíamos lo que era un tren rápido o un anuncio, teníamos poquísimas tiendas y muy poco qué comprar en esas tiendas. Parecía que no teníamos nada, entonces, pero teníamos un hermoso cielo azul” (ver: http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2013/09/china-autoritarismo-capitalismo-salvaje.html).
Como lo del maltrato a los uigures en sus “centros de reeducación” se ha divulgado en todo el mundo, la mafia china, intenta por todos los medios sanear su imagen. Y lo está haciendo, empleando redes sociales de occidente, tales como Twitter y Facebook. Es lo que expone el artículo de Associated Press, titulado “Ejército de falsos fans, infla los mensajes en Twitter”, firmado por Erika Kinetz (ver: https://apnews.com/article/asia-pacific-china-europe-middle-east-government-and-politics-62b13895aa6665ae4d887dcc8d196dfc).
Dice Kinetz que “El partido comunista que gobierna a China, ha abierto un nuevo frente en su larga, ambiciosa guerra para amoldar la opinión pública mundial: las redes sociales occidentales. Liu Xiaoming, que recientemente dejó el puesto de embajador en Inglaterra, es uno de los más exitosos soldados de a pie de este creciente campo de batalla en línea. Se unió a Twitter en octubre del 2019, como muchos otros diplomáticos chinos, que se han suscrito a Twitter y a Facebook, redes que (irónicamente) están prohibidas en China”.
¡Vaya oportunismo, pues en China, esas redes están, en efecto, prohibidas y sus versiones chinas, como WeChat y Weibo, están totalmente controladas. Por ejemplo, durante los inicios de la pandemia en China, casi de inmediato eran suprimidos los mensajes de ciudadanos que intentaban mostrar lo mal que se estaba manejando y que se censuraban a doctores o enfermeras, quienes clamaban falta de apoyo gubernamental. Eso sucedió, con Li Wenliang, el doctor que fue castigado, cuando trató de anunciar los casos de enfermos atacados por el, en aquél entonces, desconocido virus del Covid-19. El doctor, de 34 años, falleció, afectado por la enfermedad, pues la mafia china le negó toda ayuda (ver: https://www.theguardian.com/global-development/2020/feb/07/coronavirus-chinese-rage-death-whistleblower-doctor-li-wenliang).
Xiaoming, hace anuncios, para sus fans, que muestran como tonterías, a los ataques antichinos de occidente, en tanto que a sus detractores, les tira con todo lo que tiene. “Pero mucho del apoyo popular que Liu y varios de sus colegas aparentan gozar en Twitter es, de hecho, manufacturado”.
Eso se pudo comprobar mediante una investigación que condujeron conjuntamente Associated Press y el Oxford Internet Institute, en la que demuestran que la mafia china usa trucos, como robots, para que emitan “me gusta” (likes) y retwiteen la propaganda basura de nefastos como Xiaoming y otros diplomáticos chinos, quienes son totalmente fieles a la política represiva, mafiosa y de engaños de Xi Jinping. Así, en cuestión de horas, “sus tweets son muy exitosos y difundidos por la redes”.
A pesar de que Twitter y Facebook han suspendido cuentas falsas o las han marcado como “contenido gubernamental chino”, siguen creando esos diplomáticos otras cuentas. No ellos, sino equipos técnicos, controlados por la mafia china, quienes crean esas cuentas para simular “miles de fans”.
China se ha quejado de esa censura, “pues no sucede lo mismo cuando nos critican”, aduce. Pero las críticas tienen sustento, sobre todo, los malos tratos a los uigures.
De todos modos, sobre esa críticas, se defiende, diciendo que todas son “mentiras, falsos testimonios. En China, se trata bien a las minorías, y de ninguna manera, aceptaremos críticas infundadas, basadas en falsedades”. Y si “se trata así a los uigures, es porque son terroristas”, agregan en sus mentiras los mafiosos.
Incluso, recientemente, llegaron al colmo de filmar un musical sobre los uigures, tipo “La La Land” (el exitoso musical de Estados Unidos, del 2016, dirigido por Damien Chazelie), en el que se les muestra como ciudadanos modelo, todo paradisiaco, y que los tratos que se les dan son totalmente dignos (ver: https://www.theguardian.com/world/2021/apr/03/china-launches-musical-in-bid-to-counter-uyghur-abuse-allegations).
El problema para Twitter y Facebook es que los técnicos chinos que apoyan a la mafiosa maquinaria de la mafia china, emplean vulnerabilidades de esos sitios, para crear esos falsos apoyos y fama de los diplomáticos chinos y sus mentiras.
Xi Jinping “ha reconfigurado el control gubernamental del internet chino, apretando imposiciones y ligando más a los medios chinos al partido, para asegurar, como dijo en un discurso del 2006, que las redes amen, protejan y sirvan al partido”.
Lo que hace esa mafia, es la fórmula clásica de controlar cuanto se diga en cualquier medio, como se llegó a controlar a la televisión, antes tan poderosa, por ejemplo, en el México de los 1960’s, que el PRI lo dominaba todo.
Así que si Twitter o Facebook no toman medidas drásticas para controlar toda esa basura propagandística china, seguirá ésta aumentando su presencia y “presentando noticias falsas como verdaderas”.
Recuerdo uno de los videos que se subieron en YouTube, durante lo peor de la pandemia en China, en donde una chica hablaba, con mucha seguridad, de los “esfuerzos” que hacía el “gobierno chino” por mantener todo bajo control, cuando otros medios, relataban lo contrario. Sólo un análisis minucioso de tal video, mostraba que era vil propaganda.
En fin, no reparan en medios los mafiosos chinos, para defender lo indefendible.
La citada disidente Cai Xia, dice que “la gente necesita libertad y sólo es posible cuando los derechos humanos están protegidos. Para proteger esos derechos, usted necesita un sistema basado en la democracia y el imperio de la ley. Sólo cuando los derechos humanos están protegidos, puede la gente ser libre y, la libertad, está en la naturaleza humana”.
Pero, por desgracia, mientras la mafia china en el poder siga enriqueciéndose gracias a la manipulación y represión del pueblo chino, “la democracia y el imperio de la ley” serán frases vacías.
Mientras tanto, a seguir diciendo mentiras.
Contacto: studillac@hotmail.com