Por caros dentistas ingleses privados, la gente espera años para ser atendida por uno público
Por Adán Salgado Andrade
En México, la gente, relativamente hablando, tiene acceso a un dentista particular regularmente. Hay incluso servicios de clínicas universitarias que lo proporcionan, a bajo costo. O clínicas de consultorios de farmacias genéricas que igualmente dan el servicio. Y los dentistas particulares, dan facilidades que pueden ser pagadas durante algunos meses, mientras dura el tratamiento. Y podemos buscar el que dé precios más bajos, por la competencia.
Pero resulta que en Inglaterra, es tan caro el servicio privado, que la mayoría de la gente, a la que no le alcanza para pagar, digamos, una extracción, que puede costar hasta £150 libras, tiene que aguardar hasta años en una lista de espera u optar por quitarse sola los dientes enfermos.
Es lo que sucedió con Linda Colla, la que se apuntó en una lista hace siete años, para recibir atención dental, pero nunca recibió respuesta. Es lo que expone el artículo de The Guardian, titulado “La espera de siete años por un dentista: porqué Linda Colla se sacó sus propios dientes”, firmado por Sam Wollaston, quien agrega como subtítulo que “sufriendo dolor crónico, no pudiendo hallar un dentista público e incapaz de pagar uno privado, a Colla – como a millones de ingleses –, no le quedó más remedio que tomar una drástica solución por ella misma” (ver: https://www.theguardian.com/society/2025/feb/12/the-seven-year-wait-for-a-dentist-why-linda-colla-pulled-out-her-own-teeth).
Wollaston mismo, con salario de reportero, dice que estaba en lista de espera, pero gracias a que una persona canceló su cita, “me hicieron la extracción que requería a los seis meses, en un hospital, con anestesia local, no teniendo que llegar a los extremos a los que fue obligada Colla, de quitarse ella misma tres dientes”.
La señora Colla tienen 75 años y está pensionada, recibiendo una cantidad adicional, dado que su pensión es insuficiente. “Por eso, no podía pagarme un dentista particular, pues mi pensión es muy baja”.
Sí, la pensión promedio para las personas de bajos recursos, como ella, es de £267 libras por semana, casi dos semanas de pensión, así que tendría que haber gastado £450 libras por las tres extracciones. O comía y pagaba sus gastos o se las hacía.
Dice que desde los 30 años, comenzó a tener problemas con sus dientes, “probablemente porque fumaba y tomaba mucho alcohol y café”. Sus dientes estaban sanos, pero las encías ya estaban muy dañadas, con gingivitis avanzada. Como seguramente tampoco podía pagar medicamentos y, de todos modos, el servicio de salud público en Inglaterra es malo, tuvo que soportar el dolor por años. De hecho, el estado de la salud pública en Inglaterra es tan malo, que hasta pareciera una república bananera, con hospitales que se caen sus plafones a pedazos, sin elevadores que sirvan, quirófanos fuera de servicio y otras anomalías (ver: http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2025/01/hay-hospitales-escuelas-juzgados-y.html).
“Por eso, decidí quitármelos yo sola”, le dijo a Wollaston, a quien le mostró con los dedos, la forma en que lo hizo, retorciéndolos poco a poco y dando un repentino tirón. “Solo así, descansé del intenso dolor”.
“Trece millones de personas en Inglaterra – 28 por ciento de la población adulta – tienen una gran necesidad, no satisfecha, de un dentista, de acuerdo a un análisis hecho en julio del 2024, por la Asociación Dental Británica, ADB. Eso incluye 5.6 millones de personas que trataron, pedro fallaron en conseguir una cita en los pasados dos años; 5.4 millones, que no lo intentaron, porque pensaron que no conseguirían una y 1.25 millones que no lo hicieron por el costo. El número de personas en lista de espera para un dentista del Servicio Nacional de Salud (NHS), se estima que sea de alrededor de 780,000 personas”.
¡Imaginen, más de tres cuartos de millón” Seguramente, si tienen problemas de caries, por ejemplo, deben de tener un pésimo aliento, además de las molestias por el dolor. Lo peor es que si algo tan simple como atender una caries superficial, no se atiende a tiempo, puede derivar en un problema más grave, como la pérdida del diente o quizá una peligrosa infección que pudiera dañar hasta al tejido óseo. Y, como se ve, no es por negligencia, sino por falta de dinero, sobre todo, para la gente de más bajos recursos, como Colla.
Dice Wollaston que para los nuevos pacientes la cosa está peor. “El servicio ha cesado, en efecto, de existir. En diciembre del 2024, la Oficina Nacional de Estadísticas mostró que el 94.1 por ciento de gente en Inglaterra que no tenía dentista y trató de acceder al NHS para atención dental, no tuvo suerte durante 28 días intentándolo. Hay variaciones, como en Londres, que fueron 71.6 por ciento, pero en donde Colla vive, el sureste, 96.7 por ciento, no pudieron. No son números saludables”.
El problema, señala Wollaston, es que no hay suficiente presupuesto, “el que ha ido disminuyendo durante las pasadas administraciones de los Tories”.
Claro, pero sí hay para hacer caros submarinos nucleares militares, pues esos sí dejan dinero (ver: https://www.reuters.com/business/aerospace-defense/australia-invest-billions-dollars-nuclear-submarine-shipyard-2024-10-16/).
Se pagan solo unas cuantas clínicas dentales, que son insuficientes, además de que hay tres niveles de atención, pero si un tratamiento se sale de esos, el paciente debe de pagarlo de su bolsillo o parar hasta lo que le pueda hacer el dentista. “Aunque hay algunos caritativos que les dan todo el servicio, así que estarían subsidiando el servicio”.
Claro, deben de ser los menos. Los que no, han de decir, “yo sólo le puedo extraer tres dientes o “sólo le puedo hacer dos puentes”. Y ni imaginar de los tratamientos más costosos, como implantes. Sólo han de ser para ricos (incluso en México, son prohibitivos para la mayoría, pues pasan de los veinte mil pesos. y, de todos modos, con el tiempo, se van degradando y se puede afectar hasta el hueso en donde se implantaron, sobre todo, cuando se van dando otros problemas de salud).
Así que familias enteras, desde los padres, hasta los hijos, están sin necesarios servicios dentales por sus bajos salarios y porque no son atendidos por el NHS.
Wollaston platicó con Shawn Charlwood, miembro del ADB, quien le dijo que es tan grave el problema que, de no hacerse algo pronto, se colapsará todo. “La gente no puede trabajar por los dolores, no pueden dormir, no pueden cuidar a sus niños, desesperados de atención dental y teniendo que hacerse ellos solos amalgamas, pegándose los puentes y las coronas o sacándose sus dientes. No he visto, francamente progreso, desde que entró en julio el nuevo gobierno. Somos el país europeo que menos presupuesto asigna a la salud dental. Es un problema más grave que el educativo o hasta el mismo crimen. Y si esto sigue así, pronto, ya no habrá dentistas públicos”.
Dice Wollaston que se hacen 119 extracciones de dientes en niños por día, en promedio, “dientes que pudieron haberse salvado con el tratamiento adecuado”.
Colla dice que están a nivel de los 1800’s, cuando la gente tenía mala salud dental toda su vida, porque no había dentistas. “Cuando era niña, los dentistas hasta iban a las escuelas a checarnos los dientes. Ya nada de eso existe”.
Al final, Colla, pudo ahorrar lo suficiente para extraerse los últimos tres dientes que le quedaban (no los que se quitó antes), con un dentista “que no me cobró la primera cita. Y eso, se agradece”. Y le hará un puente, todo por £300 libras. “Y los que me saqué yo – le dijo a Wollaston, mostrándoselos y riendo –, los voy a cubrir con oro, cuando tenga dinero y a colgármelos del cuello”.
Bueno, será un buen consuelo para ella, claro, si puede hacerlo y si antes no muere de un ataque al corazón por una infección dental que no pueda atenderse, si le da, por el mal servicio público de salud dental inglés.
Así que si tienen pensado irse a radicar a Inglaterra por ser un país “rico y desarrollado”, vayan con dientes muy bien cuidados y saludables.
Contacto: studillac@hotmail.com